«Cita Social» de abril

La ficha de abril se titula “La tierra se está muriendo”. Por una cultura ecológica. En ella se recuerda cómo se oyó proclamar en el Club de Roma en 1972 que “El crecimiento tiene límites. La Tierra se está muriendo”. El texto se centra en que los recursos de la tierra (materias primas, fuentes de energía) son limitados. “El paradigma de los últimos 400 años –explican- ha consistido en la agresión y el pillaje sistemático, planificado y organizado de la naturaleza para extraerle todo lo posible en nuestro beneficio. Un modelo que no fue puesto en cuestión hasta entonces”.
La ficha prosigue hablando de “crisis ecológica”. Una crisis que constituye uno de los problemas más serios que se ciernen sobre la humanidad. “Hemos explotado la naturaleza pensando que era inagotable. Actuar de espaldas a ella ha traído y trae perjuicios irreversibles a escala mundial. Preocupa la disminución de materias primas, el problema de los residuos, el aumento de la contaminación, la desertización, el “cambio climático…” El ser humano ha desencadenado transformaciones sin precedentes en el planeta Tierra, con previsibles efectos adversos para las poblaciones empobrecidas, las generaciones futuras y el resto de seres vivos.  El problema ecológico es ante todo un problema antropológico, al hundir sus raíces en la orientación de la vida del ser humano”.
El texto concluye explicando que crecimiento económico, desarrollo social y protección ambiental no pueden tratarse de forma aislada. Una decisión sobre cualquiera de ellas implica a los demás. Desde la centralidad de la dignidad de la persona, hay que llegar también al reconocimiento de la dignidad de la tierra. “Si la dignidad de la persona funda los derechos humanos, el reconocimiento de la dignidad de la tierra, de todo lo creado, de la naturaleza ha de fundar los derechos ecológicos. No podemos reconocer únicamente a la naturaleza un valor instrumental. La Naturaleza tiene reglas que deben ser respetadas”.
Cita social
La iniciativa, en palabra de sus promotores, pretende dar a conocer y acercar a la sociedad el conjunto de enseñanzas que la Iglesia ha ido elaborando sobre los problemas de índole social. “Se trata de ayudar a organizar una sociedad más humana y más acorde al Evangelio”.