Primera sesión del Consejo Presbiteral

La asistencia de consejeros a la primera sesión del Consejo Presbiteral “fue casi completa, y el diálogo vivo y respetuoso” según manifestó su vicepresidente, Javier Oñate, al concluir la sesión.
En un primer momento, el Obispo reflexionó sobre el carácter deliberativo o consultivo del CP, “partiendo de su lectura de los documentos conciliares y del Código de Derecho Canónico”. Tras esta aportación, varios consejeros expusieron también sus consideraciones, “incluso con varias referencias a la que ha sido la práctica de anteriores obispos”.
El segundo tema, el del Seminario, contó con una larga introducción del actual pro-rector, Aitor Uribelarrea, que siguió el esquema de la Pastores dabo vobis. Tras un turno de aclaraciones y ampliaciones se quiso centrar el diálogo en las cuestiones que “más preocupan ahora mismo: el nombramiento del próximo rector, el bienio filosófico, la apertura del Seminario a todos los curas de la diócesis, el cambio de sede, el estilo de presbítero que se está promoviendo, el equipo del seminario…”.
Tras el descanso, el Obispo propuso los tres asuntos para los que pedía ya una valoración al Consejo y manifestó que él se vinculaba a lo que se aprobase por mayoría.  El resultado de esta consulta fue que “se acuerda que el Consejo pueda dar su opinión sobre el perfil y la persona que se ve más adecuada para el cargo de rector”, según el procedimiento que se ha venido utilizando desde 1970. “Recibidas las cartas de los consejeros, el obispo consultará al Consejo episcopal para proceder al nombramiento del rector del Seminario Diocesano”.
Por otra parte, “el Consejo prefiere como futura sede del Seminario el edificio del `refugio´ y opta por impartir las clases del bienio filosófico en la sede de Barria”, aún cuando pudiera haber alguna excepción a este criterio habitual.