Día del papa y el óbolo de San Pedro

La colecta se originó en Inglaterra en el siglo VIII como un impuesto de un centavo sobre los propietarios de tierra de cierto valor. El óbolo fue abolido por el rey Enrique VIII en el 1534. Comenzó de nuevo el siglo XIX para ayudar al papa Pío IX, que se encontraba exiliado y al perder la Iglesia los estados papales, se convirtió en una de las fuentes principales de ingreso.
Desde el Vaticano recuerdan que es un gesto que no solo tiene valor práctico, “sino también una gran fuerza simbólica, como signo de comunión con el papa y de solicitud por las necesidades de los humanos”.
Este día del papa, millones de personas recordarán al papa actual por medio de la oración “gracias por las oraciones las necesito mucho”, ha manifestado en más de una ocasión. “Rezar es mirar al cielo, mirar a nuestro corazón y saber que tenemos un Padre Bueno, que es Dios”.
Las redes sociales recogerán sin duda algunas de estas frases del pontífice que “calan” entre los creyentes y en la sociedad en general. No en vano, según un estudio publicado esta misma semana, Francisco es la persona que tiene más eco entre los líderes mundiales a través de twitter. Con 14 millones de seguidores en nueve lenguajes diferentes, los mensajes de la cuenta @Pontifex  son los más rebotados en la red.