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07.07.2011

Francisco Albalá y Toñi Caro, nuevos responsables de Pastoral Familiar

El matrimonio formado por Francisco Albalá y Toñi Caro, ambos de 39 años, será el responsable del Secretariado Diocesano de Pastoral Familiar a partir del próximo mes de septiembre, sustituyendo en el cargo a Iñaki Etxebarria y Amaia Sáez de Lafuente.

Francisco trabaja en el Colegio inglés desde 2004, donde comenzó siendo profesor de historia y geografía y de religión. Poco a poco empezó a desarrollar el área de pastoral en el centro, preparando celebraciones participativas con los chavales y actividades de sensibilización (operación Kilo en Navidad, …) En la actualidad, hasta este curso, ha sido director de Estudios de Primaria y Secundaria.
Por su parte, Toñi trabaja en la Universidad de Deusto, desde 1999. Comenzó colaborando en dos proyectos con Bosnia Herzegovina y Macedonia, para apoyar en la reconstrucción tras la guerra. Tras casi 12 años y haber participado en más de 100 proyectos, actualmente es la directora de la Oficina de Proyectos Internacionales del ‘Deusto Advanced Research Centre’. Esto, en el día a día, explica la propia Toñi “implica coordinar a un grupo de 4 personas que trabajan estrechamente con los equipos de investigación de la universidad y con la Comisión Europea y otros organismos internacionales”.
Francisco Albalá y Toñi Caro, tienen dos hijos, Xabi de 10 años y June, de 8. Se casaron en 1998, el día de Pentecostés, “fue un día preparado y vivido con ilusión, con mucha alegría, con la ilusión del envío, dentro de la Comunidad de la Institución Teresiana, que fueron cómplices y animadoras. Fue una celebración del envío porque nos fuimos a Bolivia, a poner las bases de nuestra vida de familia en un país del Sur”, relatan. “Este siempre había sido nuestro sueño, el de cada uno individualmente primero, durante nuestros años de formación, de descubrimiento y crecimiento en la fe, y después en los años de noviazgo lo incorporamos a nuestro horizonte vital cuando fuimos conformando nuestro proyecto de vida.”
En cuanto a su momento actual, ambos coinciden en que se encuentran “en búsqueda. De hecho la búsqueda es algo que nos define, -explican- que nos ayuda a cuestionar lo que hacemos y desde donde lo hacemos y a mejorar, a superarnos y a no hacernos demasiado conformistas y cómodos”.
Francisco, en la actualidad es candidato a diácono permanente “ahora mismo me encuentro realizando ciencias religiosas y madurando mi vocación”, añade. “Empezamos el verano pasado a evaluar el recorrido de los últimos diez años: la vuelta de Bolivia, el desempeño profesional, el nacimiento de los niños y la labor de poner las bases de la familia, el compromiso con la Institución Teresiana, el compromiso con nuestra familia más amplia (acompañamiento de los padres, sobrinos, hermanos), la vocación del diaconado, los retos de futuro…”
“Sentimos –continúan- que hemos ganado en profundidad y experiencia, y estamos en un momento de plantearnos qué hacer ahora, cómo sacar el mejor partido de todo lo aprendido, de todo el bagaje que hemos adquirido hasta ahora. Queremos empezar el nuevo periodo que tenemos por delante con ilusión y ganas, sintiéndonos pieza de la historia de Dios en nuestro contexto, poner lo mejor de nosotros al servicio del plan de Dios.”
Fran y Toñi relatan sus motivaciones y expectativas ante esta nueva encomienda que ahora comienzan. Él, concreta que  en  estos años a nivel profesional ha experimentado un crecimiento y aprendizaje muy grandes, “he tenido la suerte de poder aunar en un mismo puesto de trabajo lo profesional y lo vocacional y siento que estoy en un buen momento para realizar un cambio hacia adelante, algo que me plantee un reto y me ayude a seguir creciendo”. Además, añade “esta invitación al proceso de discernimiento de responsable de Secretariado Diocesano de Pastoral Familiar, llega en el momento adecuado, en medio de la evaluación que comenzamos el año pasado y sentimos de nuevo que Dios se nos adelanta y da respuesta; la posibilidad de asumir la Pastoral de Familia es algo que nos propone un compromiso conjunto, además en un tema en el que estamos comprometidos desde la vivencia diaria, desde el construir con otras  familias en el patio del colegio, en la parroquia, etc.”
“Queremos aportar nuestro granito de arena en esta área y hacerlo con ilusión y ganas”, concluyen en su presentación.
 

La familia al completo