Un año más, el 4 de julio, Elorrio se llenó para celebrar a san Valentín de Berriotxoa, del que el pasado año conmemorábamos el 25º aniversario de su canonización.
El obispo de Bilbao en su homilía precisó que “cuando aceptamos la voluntad de Dios sobre nuestra vida, cuando respondemos con generosidad y ansiamos esos dones de Dios que son el amor, la paz, el perdón, la misericordia nos encontramos con las dificultades, con la cizaña que el maligno ha sembrado en el campo de Dios: aparece la persecución, la calumnia, la envidia, el sufrimiento. Son los impedimentos del mal que resiste al bien”.
El Obispo también destacó que el amor de Dios manifestado en Cristo es el centro de nuestra fe. “Los santos son testigos y anunciadores de este amor”.
Concluyó su mensaje pidiendo que “aprendamos de la vida y el testimonio de san Valentín. Que la fe -ha dicho- nos comunique la verdadera sabiduría. El amor y la misericordia sean nuestra fuerza, la confianza en Dios y en la ayuda de su Santo Espíritu sean nuestra paz en los momentos de dificultad o de persecución a causa de nuestra fe”.
03.07.2014
“Aprendamos de la vida y el testimonio de san Valentín”
Ayer se conmemoró la fiesta de San Valentín de Berriotxoa, en Elorrio y cientos de fieles acudieron a lo largo de toda la jornada a celebrar el día de uno de los santos más populares de nuestro territorio. En la Eucaristía del mediodía, presidida por el Obispo, recién llegado de un viaje de dos semanas a El Congo, el prelado resaltó que el santo “Ya en su infancia, con la ayuda de sus padres, comenzó a conocer a Dios y a ponerse en sus manos”.
