El profesor Dubois inaugura la semana del IDTP que cierra la campaña “Pobreza Cero”

Con mucha expectación entre el numeroso público asistente, Jaime Asenjo, miembro de IDTP, presentó al conferenciante que con el titulo «Los objetivos del Milenio» abordó en su intervención el problema de la pobreza en el siglo XXI ,el primero de los 8 objetivos que 189 lideres mundiales se comprometieron a erradicar para el años 2015 en la denominada Declaración del Milenio del año 2000 y que 5 años después presenta un panorama poco alentador según se desprende del último informe de Naciones Unidas para el desarrollo humano que advierte cómo en países de África o América Latina todos los indicadores básicos de desarrollo humano han descendido mientras aumentan las desigualdades entre ricos y pobres.

El problema según Dubois es que se han rebajado los limites de exigencia y recordó cómo los quince países más ricos del mundo establecieron en el año 1996 sus objetivos de lo que debía de ser la colaboración, o sea, lo definieron cuatro años antes de la Declaración , por supuesto, sin la participación de los países pobres. Señaló el debilitamiento como una de las raíces del incumplimiento debido a que la estrategia de lucha se hace más desde la funcionalidad que desde una estrategia que tenga en cuenta la injusticia misma. Por ello animó a “recuperar la capacidad de espanto e indignación como inicio de un nuevo acercamiento a la realidad, un acercamiento que provoque reacciones, que haga tomar posiciones. Y para ello hay dos cuestiones claves: el problema no es la disponibilidad sino la accesibilidad partiendo de que las personas no mueren de hambre porque no haya alimentos, sí hay alimentos, mueren porque no pueden llegar a él; y una segunda cuestión, la revisión del concepto de pobreza se ha hecho de forma distinta en los países desarrollados y en desarrollo”

Fue precisamente el concepto de pobreza una de las cuestiones en las que quiso profundizar Dubois. Un concepto que según señaló hay que volver a definir, pero esta vez entre todos. “Porque siempre la han definido los países ricos. Una sociedad define lo que es pobreza partiendo de las posibilidades que tiene pero también de los valores que se consideran importantes. Por lo tanto el concepto pobreza viene marcado por valores y exigencias que se marca una sociedad, por eso abordar la pobreza tiene una importante dimensión política. La pobreza necesita la emoción del ser humano. Sentir la injusticia de su existencia, pero también necesita un análisis crítico, pensar cómo tenemos que afrontar esa realidad, porque bajo el nombre de desarrollo se presentan propuestas que no son justas y que sólo responden a intereses de determinados países.”

Para combatir ese debilitamiento que frena la consecución de los Objetivos del Milenio Dubois apeló a una exigencia ética y a la redistribución como el gran desafío de este siglo, porque sin objetivos de equidad, dijo, no se reducirá la pobreza. Sería, por lo tanto, necesaria una nueva redefinición de objetivos desde un planteamiento universal de las condiciones imprescindibles para el bienestar de las personas. “Es necesario hablar de un nuevo concepto de bienestar al cual todos las personas tengan acceso. Que cualquier persona en cualquier lugar del mundo pueda empezar a poner en marcha su proyecto de vida. Así la pregunta más importante del siglo XXI no será cómo ofrecer vivienda o alimentos a las personas sino ¿Para qué queremos a la gente?. Porque no servirá ofrecerle recursos sino les hemos dado la oportunidad de participar en el proceso de definir qué quieren ser”.

Hoy martes continúan las conferencias y será la profesora catalana Dolors Oller quien hable sobre “Pobreza y Democracia”.