La Jornada de los Pobres se celebró, de punta a punta en la Diócesis

El viernes, cientos de escolares participaron en Muskiz en una «réplica» local del Gesto Diocesano de Solidaridad. El centro diocesano San Juan Ikastetxea de Muskiz, también celebró la Jornada Mundial de los Pobres, en coordinación con la parroquia San Juan Bautista, de Muskiz, «desde su contexto y realidad». La actividad se inició con la marcha de los más de 300 estudiantes de 1º a 6º de Educación Primaria. Mientras realizaban el recorrido hasta llegar a la iglesia hubo retoque de campanas y, la marcha, estuvo acompañada de las pancartas hechas por los mismos estudiantes. Al llegar a la Iglesia se les hizo la acogida, el sacerdote responsable de la actividad explicó a los niños y niñas el sentido de la celebración, se realizó un gesto simbólico con una barra de pan y los escolares leyeron un manifiesto, entonaron una canción y recibieron el envío. «Los asistentes quedaron motivados con la actividad», explicaban al concluir el acto». También algunos padres y madres de los niños se animaron a participar de esta celebración.
Idoia Garai, directora del centro, resaltó la importancia de realizar esta actividad como una respuesta de responsabilidad con la invitación que realiza el Papa Francisco en esta campaña, también respuesta de Solidaridad con la Diócesis y muestra de sentido de pertenencia con la parroquia donde se encuentra el centro, porque gran número de sus alumnos y padres y madres, asisten a la catequesis familiar.
 Eskaut
Alrededor de 140 jóvenes eskaut se dieron cita el sábado en el colegio Jesuitas, de Indautxu, para realizar el primer encuentro de la coordinadora Trebeak. Este encuentro, «ha sido en clave de retiro y ha estado enmarcado en el tema  de la jornada que el papa Francisco ha convocado para el domingo y el gesto diocesano celebrado el día anterior», explicaban a la salida.
Karrantza Lanestosa
La iglesia de San Ignacio (La Estación) fue el lugar elegido por la U.P. de Karrantza-Lanestosa para celebrar la Eucaristía  de la «Jornada Mundial de los Pobres». Se contó con un acompañamiento musical compuesto de guitarra, órgano y violín, este último a cargo del profesional ucraniano Danylo Betsko, que conmovió a los asistentes especialmente en el momento en que representantes de los diversos grupos (niños, jóvenes, mayores, catequistas, referentes parroquiales, inmigrantes) se dirigían en procesión al altar para situar un corazón en cada una de las 19 iglesias que componen la unidad pastoral. Además, en Biañez, tuvo lugar, por la tarde, un acto oracional de la comunidad inmigrante.
Estas celebraciones han sido el punto de partida y envío para varias iniciativas que nos llevarán al encuentro de diversos  colectivos: ancianos, enfermos, familias en duelo, inmigrantes, etc. Se ha iniciado una tradición que esperamos cobre fuerza, vigor y novedad el año que viene.
 UP Errekarte
En Errekarte se juntaron a las 11 de la mañana, en la iglesia del Buen Pastor de Lutxana, personas de las 8 parroquias que forman la Unidad Pastoral. «Compartimos una oración común de entrada para seguir a continuación, con diferentes talleres por edades». Realizaron murales en torno al tema de la pobreza. Los jóvenes estuvieron con el sacerdote Dieu Merci Pakasa, hablando sobre la realidad del Congo y la conexión con los móviles y otros instrumentos electrónicos. Finalmente los mayores estuvieron analizando la realidad de Cáritas en la zona y las maneras de combatir la pobreza. Se clausuró la jornada con una única eucaristía en toda la UP, en la que participaron todos los grupos y personas de las parroquias, en la que se recogieron las todas las aportaciones recibidas.
Ariz (Basauri)
En Ariz-Basauri prepararon mesas y compartieron la experiencia de pobreza en la pérdida «como el trabajo o la falta de ingresos suficientes para vivir, de salud, ruptura de pareja o familiar etc».
San Pedro de Deusto
En la parroquia de San Pedro, de Deusto, se han celebrado tres actos. El primero el viernes: un taller de sensibilización con los grupos de Sarbide (Confirmación) que ya había empezado el viernes anterior.
El segundo en la misa familiar del domingo, con el testimonio de Pascal, refugiado congoleño, que compartió su experiencia desde que salió de su país hasta llegar a Bilbao, donde le acogió Lagun Artean. “También rezamos juntos con él porque es cristiano”, explican desde la parroquia.
El tercero, el domingo en la misa de la comunidad, que fue especialmente orientada por la intención del Papa. Después de la misa, en el pórtico, tuvieron un picoteo compartido con todos los amigos y amigas de Lagun Artean. “Esta vez nos invitaron ellos. Como hacia buen tiempo estuvimos disfrutando de la convivencia”.