Las Esclavas del Sagrado Corazón celebran su 125 aniversario

Han pasado 125 años desde que las primeras Esclavas del Sagrado Corazón  de Jesús llegaran a Bilbao con el deseo de “dar educación cristiana al mayor número posible de niñas y jóvenes”. Junto con ese ideal llevaban otros muchos proyectos propios del carisma del Instituto: “Estar cerca de los más necesitados, crear asociaciones para jóvenes y señoras, atender a la catequesis de niños y adultos, proporcionar a la gente una casa de oración y una capilla donde encontrase con Dios y aprender a escucharle”.
Txaro Villarán, una de las religiosas de esta orden en Bizkaia explica que, actualmente, en Bizkaia tienen dos comunidades, “una en Cabieces-Santurtzi formada por 5 hermanas, que atienden un proyecto de Cáritas Txikitxu dedicado a niños de 6 a 12 años; colaboran en la parroquia de San Pedro y con las Antiguas Alumnas del colegio de Las Arenas, que gestionan con mucha ilusión el Taller ocupacional Santa Rafaela Mª, en Zorroza y otra de las hermanas, colabora con CONFER”.
La otra comunidad está en Tiboli-Bilbao formada por 16 religiosas, que, en misión compartida con otras personas, atienden pastoralmente los Colegios de Fátima (Enekuri) y el Colegio Esclavas del Sagrado Corazón de Tiboli. “Desde hace años –destaca Villarán- existe el Movimiento Juvenil laical ACI, que vive su compromiso cristiano desde la espiritualidad de Santa Rafaela Mª”. El alumnado de los centros mencionados está hermanado desde hace años con un colegio de Filipinas y otro en Timor.
Varias hermanas colaboran en el sector Artxandape con la Pastoral de la salud y animación de tercera edad y en la casa de Tiboli está la Curia Provincial formada por tres hermanas. “En contacto con nuestras comunidades han surgido las Asociaciones de adoradoras, que colaboran en el culto eucarístico y desarrollan distintos compromisos que nacen de su vivencia de la Eucaristía”, concluye Villarán.