En la celebración del Día de Santa Clara
Mons. Segura: «La gente necesita novedades, pero en realidad eso a veces nos despista»
Mons. Segura ha resumido en una palabra lo que de verdad marca el norte en esta sociedad: "el amor", que puede convertirse en "un programa de vida". Es una de las ideas que ha querido transmitir el obispo en su mensaje del Día de Santa Clara, en el marco de la celebración litúrgica que ha compartido con las hermanas capuchinas de Basurto. La misa, en la que se ha recordado a todas las personas que como "aquélla mujer especial" han seguido con el reto de que la "vida de Jesús vaya creciendo cada vez más fuerte en cada uno de nosotros", ha estado concelebrada por el padre agustino, fray Pedro; el capellán de las monjas, Francisco Javier Rojas y el nuevo director del secretariado para los conventos de clausura, Ernesto Bilbao. El obispo de Bilbao ha destacado que la vida espiritual de la Madre Clara osciló "entre la pobreza y el Reino de Dios". El prelado ha pedido a la comunidad de monjas que sigan rezando por todos nosotros y en especial hoy, por Fernando Elorrieta, presbítero por el que se celebrará la misa funeral esta misma tarde, a las 19:00 h. en la parroquia de Begoña, lugar en el que ejerció de párroco.
«Es necesario custodiar el corazón y eso nos habla de la necesidad de buscar cierto grado de pureza espiritual, el cual hace que la cercanía de Dios sea auténtica y no apariencia«, ha señalado entre otras cosas el prelado en su homilía.
Se ha dirigido a las hermanas tomando como referencia algunas características de la Santa y les ha hablado de oración, que es «vuestro instrumento fundamental y también la experiencia, que os aleja o acerca a Dios». Y se ha referido a la búsqueda de imitar a quien se contempla que, «resulta de una vida de relaciones con las hermanas construida en espíritu de caridad, perdón y misericordia».
«Clara os llama hoy también a vivir en un contraste profundo con este mundo que huye de la pobreza, de todo tipo de pobreza. Que no reza, porque cree que es capaz de arreglarlo todo por sí mismo, sin ayuda. Aunque, una y otra vez, los hechos demuestran que las cosas no son así«, les ha dicho. En este sentido, les ha exhortado a seguir rezando por todos nosotros.
