Mañana se inaugurará oficialmente el nuevo curso pastoral diocesano

El curso que mañana se inaugura, en lo que al III Plan Diocesano de Evangelización respecta, es un año de prorrogación en el que se pretende consolidar los pasos dados en la tarea evangelizadora a lo largo de los tres últimos años, además de servir para buscar aquellos objetivos y elementos que podrían configurar la elaboración del siguiente Plan.
El obispo abordará las líneas fundamentales a seguir durante este nuevo curso no sólo en la celebración de mañana sino también a través de un documento que se hará público en todas las parroquias y en la que se señalarán pautas para “erigir las necesarias unidades pastorales y optimizar nuestros recursos con el fin de servir mejor al Pueblo de Dios”.  El Obispo y su Consejo Episcopal señalan además que “la eficacia en el impulso misionero de tales unidades pastorales dependerá del entusiasmo y generosidad con que todos nos empeñemos en su puesta en marcha y la necesaria implicación personal y comunitaria”.
Así, la transmisión de la fe a las familias, los jóvenes y los niños y preadolescentes, junto a la remodelación pastoral y el impulso misionero serán las claves sobre las que pivotarán, en línea con el trabajo de los últimos años, la acción pastoral en nuestra diócesis. Estas claves serán también las que marquen las acciones e iniciativas que se desarrollaran a lo largo del presente curso. Acciones tales como el Gesto Diocesano de Solidaridad del 8 de mayo que “pretende acoger el desafío ecológico de la humanidad”, la sesión formativa general en noviembre sobre “Cómo hablar de Jesús en un contexto de indiferencia” que acompañara Fernando Vidal, o el retiro oracional para el monitorado organizado para marzo desde la Mesa Diocesana de Tiempo Libre entre otras acciones.