27-09-2025 Sábado, XXV semana - tiempo ordinario
Bizkeliza 5 75 aniversario 5 Cerca de mil personas llenan Elorrio en el Goazen 2025
27.09.2025
Jornada conjunta de inicio de curso

Cerca de mil personas llenan Elorrio en el Goazen 2025

La basílica de San Valentín de Berriotxoa ha acogido hoy el acto central de la inauguración del curso de la diócesis de Bilbao. En el encuentro han participado cerca de un millar de personas en un ambiente de alegría, convivencia y fe. La jornada, marcada por el contexto del Año Jubilar por el 75 aniversario de la diócesis, ha subrayado la vocación sinodal y misionera de la Iglesia en Bizkaia.

La mañana del Goazen 2025 ha comenzado con una peregrinación simultánea desde cinco puntos diferentes de Elorrio, convocando a fieles de todas las vicarías.

En cada punto de partida de la peregrinación, se ha propuesto a la feligresía vivir el camino como una oportunidad para el examen personal: «¿Hago mía la misión de Jesús? ¿La acojo y la traduzco en hechos?». Además, se ha animado a aprovechar la peregrinación previa a la eucaristía para acercarse al sacramento de la reconciliación, transformando el perdón recibido en un compromiso activo de protesta, solidaridad y compromiso con los que sufren en el mundo.

Rito Jubilar y entrada procesional

Al mediodía, la comunidad se ha congregado a las puertas de la basílica de San Valentín de Berriotxoa para un momento significativo: el rito de apertura de la basílica de Elorrio como templo jubilar. El obispo de Bilbao, Joseba Segura, ha portado la cruz jubilar –una imagen del Cristo Crucificado del siglo XVI, procedente de la iglesia de los Santos Juanes. Esta cruz se custodia en la catedral de Santiago desde diciembre de 2024, día de la apertura del Año Santo en Bizkaia. El obispo ha dirigido la oración de apertura. La feligresía ha entrado en procesión a la iglesia de la Purísima Concepción.

San Valentín ofrece la bienvenida

Una vez en el interior, los asistentes han recibido una grata sorpresa. Un actor, dando vida a San Valentín de Berriotxoa, ha recibido a la comunidad con un monólogo cercano y cálido, intercalando euskera y castellano. En los alrededores del sepulcro, el santo misionero elorriotarra ha compartido recuerdos de su vida, ha reflexionado sobre la sinodalidad –“trabajar juntos, escucharnos, como en el taller de mi padre”– y ha animado a la Iglesia en Bizkaia a ser “presencia y alegría para los demás, lekuan lekuko”.

Homilía: el poder de la reconciliación

La Eucaristía, acompañada por el coro parroquial, ha contado con la participación activa de la comunidad de Elorrio, así como con la presencia significativa de las monjas dominicas del monasterio de Santa Ana, lugar donde el propio San Valentín sirvió de monaguillo en su juventud.

En su homilía, el obispo Joseba Segura, tomando como hilo conductor el ministerio de la reconciliación, ha destacado que el Jubileo y el aniversario de la diócesis «son mucho más que fechas redondas«. Ha añadido:  “no comenzamos de cero, pero sí comenzamos de nuevo. Dios nos ha confiado el ministerio de la reconciliación precisamente aquí, en este momento de la historia”.

Ha desglosado la cuestión en tres dimensiones: la reconciliación personal: “si alguien no ha descubierto la necesidad de pedir perdón… puede aparentar que cree en Jesucristo, pero en realidad no cree”. La reconciliación comunitaria –donde ha abogado por valorar la diversidad de lenguas y sensibilidades como “el altxor” (tesoro) de la Iglesia–, y la reconciliación para el mundo, como testimonio creíble en una sociedad polarizada. ¿Cómo sabe el mundo que somos discípulos? ‘En que nos amamos unos a otros’. No porque tengamos más o menos razón, sino porque hay un amor que nos une en las diferencias”.

Un símbolo de crecimiento

Durante el ofertorio, se ha mostrado ante el altar una planta florecida que ha brotado de la semilla que se repartió en la jornada “Elizea Plazara” del pasado mes de mayo, simbolizando el crecimiento y los frutos que puede dar la semilla de la paz.

La jornada ha concluido con un piscolabis ofrecido por Lapiko Catering, la empresa de inserción social de Cáritas Bizkaia, lo que ha permitido un espacio prolongado de fraternidad y conversación entre los participantes, poniendo el broche final a un día que ha marcado el tono misionero y esperanzador del nuevo curso pastoral.