El presidente de la HOAC de Bizkaia, Jorge Torralbo, destacó su “ejemplo de militancia y esperanza”, subrayando que siempre puso en el centro a las personas empobrecidas del mundo obrero y «nos acompañó en vivir la mística y la espiritualidad de la HOAC desde la gracia, la responsabilidad, y la alegría. Entre recuerdos cercanos también hubo espacio para mencionar sus aficiones: la pelota, el fútbol, los toros, la pintura, la montaña y la música clásica».

Familia
El ámbito familiar estuvo presente en las palabras de Juanrra Bizkaia, sobrino de Lechosa, quien relató su infancia y la trascendencia de su figura en la familia, señalando cómo “siempre fue nuestro referente ético y social” y cómo sus homilías, más que doctrinales, eran cercanas a los problemas reales.
El acto contó con Javi Madrazo como presentador que fue dando paso a los diferentes testimonios. Desde su vocación sacerdotal, Madrazo recordó que «eligió seguir a Jesús en la Iglesia desde la opción por el mundo obrero empobrecido, alejándose del clericalismo y ejerciendo un ministerio basado en la cercanía, la humildad y el respeto». También Joseba, compañero de seminario, puso en valor su actitud de búsqueda, amistad y confianza, así como su fe en los pequeños grupos cristianos «como fermento de una Iglesia nueva y de una sociedad más justa».
Joseba Egiraun, cura de Rekalde y compañero de Juan Mari en el seminario recordó que ya en «sus inicios en el seminario mostraba como una característica suya su deseo de buscar y conocer que para mí era la actitud de un líder». Destacó el sentido de la amistad y de su disponibilidad en un contexto de confianza y generosidad. «Confío en los pequeños grupos cristianos como fermento de una nueva iglesia y no sólo como renovación de la Iglesia sino como fermento del cambio en la sociedad».
Otro de sus grandes amigos, Javi Vitoria, rememoró los años compartidos desde el seminario y su ordenación en 1965, en pleno Concilio Vaticano II, “el acontecimiento más importante de la Iglesia en los últimos siglos”. De Juan Mari dijo que “recordaba a Jesús de Nazaret”, una figura con autoridad carismática fruto de su profunda experiencia de encuentro con el Dios de Jesús.
Hubo unos momentos en los que se escuchó un vídeo de una conferencia, organizada por el Instituto Diocesano de Teología y Pastoral (IDTP), sobre su apuesta por una Iglesia sinodal y corresponsable.
Pastoral Obrera
Sebastián Trujillo relató los orígenes de su compromiso con la Pastoral Obrera, marcada por unas jornadas en Begoña cuando Juan Mari tenía apenas 24 años. “Si algún día percibís que traiciono este compromiso, denunciadme”, fueron las palabras de entonces. Lo definió como “una de las mentes más lúcidas de la diócesis. Fue un estudiante interesado, integrante, incómodo como Jesús con los sabios del templo y con el statu quo.»
En el acto también se destacó no solo su vocación pastoral sino la contemplativa: mantuvo una estrecha relación con las Clarisas de Donamaría, quienes también enviaron un mensaje lleno de cariño.
Pastoral de la Salud
Ana Pérez Pons, compañera en la Pastoral de la Salud, rememoró sus años de trabajo compartido en el Hospital de Basurto. Subrayó su sabiduría, cariño y fe: “Aunque su ausencia pesa, su amor nos acompaña porque sembró compasión, entrega y luz”.
Txabi Igobatzeta, cura diocesano que vivió con él en Lutxana, en su primer destino lo evocó como alguien que “no optó por los pobres, sino que se hizo pobre”.
Carmen Carcedo, miembro de su equipo de Rekalde recordó sus tres décadas de acompañamiento como consiliario en la militancia de la HOAC: “Siempre centrando nuestras reuniones, iluminando el Evangelio desde su ser cura obrero y militante cristiano”.
El acto concluyó con las palabras de Kerman López, vicario general, quien condujo el paso del recogimiento al gesto público en la plaza, «al estilo de Juan Mari». Recordó su enseñanza, la oración como experiencia vital, invitando a ver, juzgar y actuar frente a la injusticia, con una mirada puesta en quienes sufren, desde Gaza hasta el mundo obrero más precarizado.
El homenaje no solo fue un recuerdo, sino también un compromiso colectivo: seguir el ejemplo de Juan Mari en la defensa de la dignidad del trabajo y en la construcción de una Iglesia cercana, encarnada y al servicio del Reino.
Zorrotza
En Zorrotza también se sumaron a la conmemoración de «Iglesia por el Trabajo Decente», teniendo especialmente presente la realidad tantas personas migrantes que no ven reconocidos sus derechos.
Pamplona
Mañana martes 7 de octubre, Jornada Mundial por el Trabajo Decente, Imanol Zubero, doctor en sociología y profesor titular la UPV impartirá una ponencia titulada «Nuevas vulnerabilidades en el mundo del trabajo: nuevas sensibilidades y respuestas», a las 19:00, en el aula magna del Seminario Diocesano, de Pamplona. A continuación, Maite Valdivieso, responsable de Pastoral Obrera de nuestra Diócesis, ofrecerá su ponencia: «Las respuestas desde el mundo de la fe».
Recientemente la Pastoral del Mundo del Trabajo ha comenzado su andadura en Navarra, con el nombramiento de un director, Eduardo Gorriz y contando con un equipo que está trabajando con mucha ilusión. Hoy lunes, celebrarán una Vigilia presidida por el arzobispo Florencio Roselló .