El acto de inauguración de curso de ayer sirvió como presentación del IV Plan Diocesano de Evangelización que ha contado según mons. Blázquez “con una participación amplia de personas, grupos y consejos diocesanos”. Precisamente, al final del acto se hizo una entrega simbólica de un ejemplar de este IV Plan Diocesano de Evangelización a representantes de las vicarías, consejos, movimientos, etc.
El obispo, durante su intervención, dijo que “un Plan Diocesano de Evangelización significa que todos quieren mirar en la misma dirección” y, recordando el Sínodo de los Obispos del pasado año sobre la Palabra de Dios, señaló que “nuestra aspiración es ésta, que la palabra de Dios sea oída, escuchada, recibida con el corazón abierto y puesta en práctica en la vida”. Durante su homilía, también incidió en que “leer personalmente o en familia la Sagrada Escritura es una necesidad fundamental. Cuando es la Palabra de Dios la que nos convoca a personas y grupos diferentes, estos son más perseverantes”, de esta forma animó a seguir a los grupos existentes y a crear otros nuevo, destacando que “sin la oración que renueva la fe, no podemos ser pastores”.
El acto, muy bien estructurado, y en el que la música tuvo una importante presencia, también sirvió para realizar el “envío” del sacerdote diocesano Paulino Ordax como misionero a Ecuador, encomienda que desarrollará a partir de este curso.
Mons. Blázquez también tuvo presentes a diferentes colectivos en situaciones difíciles como las generadas por la actual crisis económica o las víctimas del terrorismo “queremos estar cerca de las víctimas del terrorismo y participar en los trabajos por la paz”. Para seguir proclamando que “la defensa de la vida humana desde el principio y hasta el final también es parte de nuestro compromiso”.
Para concluir su intervención, en la ceremonia de principio de curso, mons. Blázquez recordó que estamos en el año sacerdotal convocado por el Papa Benedicto XVI para que los sacerdotes y cada cristiano “seamos interiormente renovados para poder emitir el testimonio evangélico dejando una huella intensa”. Y finalizó diciendo que “Al comenzar el curso pastoral, escuchemos la palabra de Jesús: ‘Rema mar adentro. No tengas miedo. Yo estaré contigo’. Invoquemos a la Virgen de Begoña con las palabras ‘ven con nosotros a caminar. Ven con nosotros ven’”.
28.09.2009
“Sin la oración que renueva la fe, no podemos ser pastores”
Estas palabras fueron pronunciadas ayer por el obispo, mons. Ricardo Blázquez, en el marco de la celebración del inicio de nuevo curso pastoral 2009-2010, que presidió en la catedral de Santiago de Bilbao, y en la que estuvo acompañado por su obispo auxiliar mons. Mario Iceta, así como por el Consejo Episcopal de la Diócesis y miembros del Cabildo catedral. Mons. Blázquez, en su homilía, tras saludar a todos los presentes, agradeció su participación “aquí y ahora y después en los trabajos apostólicos”.