La cocaína concentra la mitad de asistencias de Gizakia

La Fundación Gizakia, especializada en la prevención, asistencia e inserción sociolaboral de los afectados por las drogas, no ha recibido peticiones de asistencia relacionadas con el consumo de los «nuevos» alucinógenos. El colectivo de personas drogodependientes sigue consumiendo, mayoritariamente (46% de atenciones), cocaína.
Este verano se ha puesto de moda, entre algunos jóvenes, el consumo de estramonio o del alcohol inhalado (oxy shot) con la intención de «colocarse» más rápido. El resultado ha sido mortal para más de un joven que ha perdido la vida por la ingestión de infusiones de estramonio en combinación con otras drogas convencionales. La directora de la Fundación Gizakia, Estíbaliz Barrón, explica que el problema actual del consumo de drogas es que «muchos prueban cualquier cosa sin pensar en las consecuencias». Sin embargo, de momento, no han recibido peticiones de tratamiento derivadas del consumo de estas nuevas drogas peligrosas.
La Fundación afronta el curso incidiendo en sus pilares fundamentales, desde la prevención hasta la sensibilización social. A lo largo del año 2010 Gizakia atendió las demandas de intervención de 4.183 personas. El colectivo de personas drogodependientes sigue siendo «predominantemente masculino». Casi la mitad de la población atendida se encuentra en la franja de edad comprendida entre los 30-40 años. «No obstante – prosigue Estibalíz Barrón- observamos que el tanto por ciento de personas atendidas en edades inferiores a 25 años, es ligeramente superior al del año pasado».
La droga que suscita el mayor número de demandas sigue siendo la cocaína (concentra la mitad de las atenciones). Barrón destaca el hecho de que el 25% de las personas atendidas eran heroinómanas, «desmintiendo la idea generalizada de que esta droga ha desaparecido de nuestras calles».
El alcohol, tan socialmente aceptado en nuestro entorno, es la causa de un 11% de los problemas atendidos. En los datos recogidos en los hospitales de Osakidetza, cada semana, tratan a dos menores de media, por consumo de alcohol que ha alterado sus constantes vitales.
Casi la mitad de los adolescentes atendidos por la Fundación Gizakia, han llevado a cabo recorridos previos en psicólogos o psiquiatras de ambulatorios, centros de salud mental o gabinetes. Por lo tanto, «muchos de los casos en los que intervenimos arrastran problemáticas desde hace tiempo», prosigue Estíbaliz.
Patología dual
Desde el año pasado, las Fundaciones Gizakia y Argia trabajan de forma conjunta para mejorar la atención a personas con patología dual (personas que además de una adicción, padecen una patología mental). Las dos entidades «venimos reflexionando sobre esta problemática y la forma de abordar esta patología». Por lo tanto, a lo largo del primer semestre de 2011, un grupo de trabajo compuesto por profesionales de ambas entidades ´»se ha reunido mensualmente para profundizar en la mejor comprensión de esta realidad y en la identificación de las pautas de abordaje más adecuadas con personas de patología dual».
Estíbaliz Barrón realiza una «valoración positiva» del trabajo realizado el pasado año, con relación tanto «al alcance de la atención de nuestros programas como con los resultados de nuestras intervenciones». Paradójicamente, lamenta que cada vez son más las personas que necesitan su apoyo y siguen confiando en «disponer de recursos suficientes para mantener los niveles de atención que la sociedad nos demanda».