El presidente de los Archiveros de la Iglesia en España, Agustín Hevia, se mostró «muy satisfecho», en la recepción que ofreció a los archiveros, el diputado de presidencia de la Diputación Foral de Bizkaia, Juan María Aburto, por haber experimentado «el verdadero espíritu de acogida de Bilbao». Los congresistas realizaron una visita guiada por el «símbolo de la sociedad y las instituciones de Bizkaia, y que también es guardián de la memoria de buena parte de la historia de Bizkaia», en expresión de Aburto. El diputado elogió y reconoció la labor de los archiveros porque «quien no conoce, asume o respeta su historia, su memoria, o la raíz de su cultura y sus valores, difícilmente sentará las bases adecuadas para construir una sociedad mejor», añadió.
La Santa Misa de clausura, presidida por el vicario general, Félix Alonso, se celebró en la Catedral a las 19.30h. Recordó en su homilía a la Virgen de los Dolores que ayer celebraba su día. «La liturgia de hoy – dijo- es una invitación a meditar sobre el camino de dolor que, en la vida, suele ir paralelo al de la gloria y felicidad dándose la mano» y añadió que «la Virgen del Calvario no sólo conmueve, sino que, sobre todo, causa admiración».
También subrayó la coincidencia de poder terminar estos días de trabajo y amistad celebrando una fiesta de la Virgen. «Yo la veo como la primera archivera de la Iglesia. El evangelio nos dice que guardaba y meditaba todo en su corazón», explicó.
Al finalizar su homilía, Félix Alonso, agradeció a Dios la labor que realizan los archiveros de la Iglesia, haciendo suya la reflexión del Dr. Pedro Rubio Merino: “Los archivos de la Iglesia constituyen su memoria histórica y son testigos de la fe de nuestro pueblo».
Cena de clausura en el Museo Diocesano
Tras la eucaristía, los archiveros disfrutaron de una cena en el claustro del Museo Diocesano. Anabella Barroso, directora del Archivo Histórico Eclesiástico de Bizkaia y organizadora del Congreso, valora positivamente el encuentro. Además de las sesiones intensas de trabajo, «también ha habido un tiempo para el reconocimiento y agradecimiento a la labor de muchos archiveros, algunos ya fallecidos, como don Vicente Ilzarbe, de Tudela», explica. Ayer, en la cena de clausura, se entregaron medallas a archiveros ya jubilados. La Asociación dio una al anterior director del Archivo de Bilbao, a don Eusebio Martija, y tambien «por primera vez a una mujer laica», Maite Arana, que trabajó desde 1976 al año 2010 en nuestro archivo. «Habíamos organizado este congreso con mucho esmero -prosigue- y con especial ilusión para que conocieran el Archivo y el Centro Icaro». Los organizadores estiman que «se han llevado una grata impresión de nuestro trabajo y hemos hecho realidad lo que don Agustín Hevia, presidente de la Asociación, decía en la introducción del congreso:Bilbao, tierra de acogida».
15.09.2011
Finalizan las jornadas de Archiveros
Los cerca de cien archiveros de la iglesia en España que nos han acompañado a lo largo de esta semana finalizan hoy su estancia en tierras vizcaínas. Ayer se clausuró oficialmente el XXVI Congreso de la Asociación de Archiveros, que comenzó el pasado lunes, con la Santa Misa celebrada en la Catedral. La jornada de hoy incluye una visita al monasterio cisterciense de Ziortza y una vuelta por Lekeitio para finalizar en el Museo de la Paz de Gernika.