En Euskadi casi 2.000 personas no tienen hogar, de las cuales casi 300 viven en la calle. “Una sociedad como la vasca no puede permitirse que personas que tantas personas vivan en un seno con un nivel de protección social tan bajo”, piden desde la Plataforma BesteBi y reclaman, además la puesta en marcha de una Estrategia Vasca integral y coordinada, que tenga como objetivo que ninguna persona viva sin hogar en Euskadi.
En el texto leído esta mañana, Beste Bi explica que actualmente, el Gobierno Vasco está elaborando una Estrategia de erradicación del sinhogarismo, de la que valoran positivamente sus contenidos, así como que: “dé coherencia a la política y normativa vasca en materia de intervención con personas sin hogar, se trabaje desde una perspectiva de género, planteé la necesidad de servicios y acompañamiento a personas sin hogar que sean adaptados, adecuados y dignos, se tengan en cuenta aspectos como la garantía de ingresos y el acceso a la vivienda, dé importancia a la coordinación entre sistemas y tenga en cuenta la opinión de las personas que experimentan o hayan experimentado sinhogarismo”. Aunque también destacan que su carácter de libre adhesión y no contar con un presupuesto para su desarrollo, impedirá que se alcance el objetivo de erradicación del sinhogarismo.
Por ello, reclaman que se preste especial ATENCIÓN Y SENSIBILIDAD A LA SITUACIÓN DE VULNERABILIDAD DE LAS MUJERES; se trate de una ESTRATEGIA GLOBAL que comprometa a toda la Administración Vasca; se la dote de un presupuesto que permita el desarrollo de las actuaciones.
Y, finalmente, cuestionan sobre qué compromisos adquieren Gobierno Vasco, Diputaciones y Ayuntamientos para que nadie duerma en la calle: “nadie debe verse obligado a dormir en la calle por falta de servicios de calidad adaptados a sus necesidades; para que nadie viva en un alojamiento de emergencia por un período superior al necesario. En ningún caso, los albergues deben convertirse en sustitutos de hogares reales; Para que nadie resida en alojamientos temporales más de lo estrictamente necesario. Los albergues, centros de acogida y viviendas tuteladas deben concebirse como pasos hacia una solución estable de alojamiento a corto y medio plazo; para que nadie abandone una institución sin alternativa de alojamiento. Las personas jóvenes extuteladas, los enfermos dadas de alta en hospitales y las personas que terminan su condena son los colectivos más vulnerables, y deben recibir ayuda para evitar el proceso circular que va de la tutela institucional a convertirse en persona sin hogar y de nuevo regresar a la tutela y para que ninguna persona joven termine sin hogar como consecuencia de la transición a la vida independiente. Se deben hacer más esfuerzos para ayudar a las personas jóvenes a emanciparse y facilitar su acceso a la vivienda”.
27.04.2017
500 personas en la marcha por la dignidad de las personas sin hogar
Esta mañana se ha desarrollado por las calles de Bilbao una marcha en apoyo a la dignidad de las personas sin hogar. Al concluir la convocatoria se ha leído un manifiesto “Por el desarrollo de una estrategia para la erradicación del sinhogarismo en Euskadi".