El responsable de la Unidad Pastoral, Javier Oñate señala que el acto se desarrolló en un ambiente de gratitud, alegría y hermandad. Parroquias, colegios y asociaciones recibieron el decreto episcopal de constitución y los primeros nombramientos para su Equipo Ministerial.
Además, en el contexto de la Eucaristía el Consejo Pastoral fue enviado a la «misión compartida». Hubo momentos emotivos al recordar a cuantos han hecho posible lo que ayer se celebraba. “La imagen de la tomatera, alimentada por la misma savia y el mismo sol, variada en sus frutos y ofrecida a todos quedó en nuestra memoria como imagen de lo que somos y queremos ser. En el pórtico dimos buena cuenta de un picoteo”, concluye Oñate.