A diario, los 5 jóvenes voluntarios participantes (dos de Ermua, una de Alonsotegui y dos de la UP Artxandape), además de Óscar Jiménez y Jorge Muriel, directores de Bidesari y Pastoral Penitenciaria, comenzaban su jornada a las 9 de la mañana dentro de la prisión donde participaban en diversas actividades. Posteriormente se trasladaban a la parroquia de San Antonio de Etxebarri, donde les cedieron un local parroquial para hacer cada día una Lectura Creyente de la Realidad de lo vivido durante la mañana dentro de la cárcel.
Ayer concluyó la experiencia con la celebración de la misa dominical de la prisión. Durante estas jornadas han participado en campeonatos de parchis, tute, pinpón, juegos cooperativos, frontenis, así como en una actividad organizada por la sala Rekalde.
Jorge Muriel, director de Pastoral Penitenciaria, al término de la experiencia ha destacado que el resultado ha sido muy bueno, “los jóvenes comenzaron nerviosos pero eso es lógico, no todos los días se entra en prisión». También ha explicado que la acogida fue muy cálida por parte de los chicos, “ellos siempre suelen ser agradecidos. saben que son voluntarios y que donan su tiempo gratuitamente. Eso les sorprende y les agrada. Un modo diferente de pasar la Navidad”.
Un pequeño «cuaderno de testimonio cristiano»
Tras vivir esta experiencia, los participantes en el campo de trabajo han ido escribiendo sus “sensaciones”. Reproducimos algunas de ellas: «Antes de empezar los nervios y la incertidumbre era lo que más resaltaba… … también había mucha curiosidad al ser todo nuevo. Parecía otro mundo… …Por último, el ver que se reían contigo y que en todo momento que estabas con ellos tenían una sonrisa en la cara da qué pensar. Que sólo el hecho de estar alli y escucharles ya ves que eres importante para ellos»; «Entras, lo miras todo, todo es extraño… díficil romper el hielo, alguien lo hace y respiras. Pero curiosamente en el momento que te aceptan y tu los aceptas a ellos dejas de pensar en su culpabilidad y delito… la despedida es calurosa, todos tienen una única pregunta en los labios ¿vais a volver?»; «No se puede pagar con dinero el que los chicos estén esperando para saludarte y comenzar con la dinámica»; «Para mi son personas, personas normales y corrientes, como con las que me puedo cruzar cuando voy por la calle. Y es que cualquier persona podría estar presa. Todo el mundo comete errores, lo que cambia es la forma en la que se «paga».
30.12.2013
Campo de trabajo de jóvenes en la prisión de Basauri
Bajo el lema "Jóvenes y experiencias de encuentro con el Dios de Jesús en el mundo de la exclusión", ayer domingo, concluyó un campo de trabajo acompañado y animado por Pastoral Penitenciaria. La iniciativa, promovida por las Delegaciones de Caridad y Justicia y Catequesis y Evangelización, se ha centrado en promover experiencias de encuentro y voluntariado con perspectiva cristiana.