El Buen Samaritano inspira a Pastoral de la Salud

Las comunicaciones sobre el tema de la salud, basada en la parábola del Buen Samaritano, que presentaron los ponentes no dejaron indiferente al público asistente al cursillo de formación. Eran, en su mayoría, mujeres que cuidan de alguien y se “encargan” de esa persona, que no es lo mismo que “cargar con”, tal y como matizaba la especialista en bioética Marije Goikoetxea.
Goikoetxea considera que ante una enfermedad es imprescindible “reconocer la dignidad de la persona y por lo tanto, “su valor”, que no hay que confundir con “precio”.
Ana Berrizbeitia, miembro del departamento de Liturgia del Obispado, habló en primera persona de la enfermedad que padece. Ante situaciones de vulnerabilidad apostó por “atrapar los pellizcos de la vida que nos hacen sentir que somos”. “Somos pura narración – matizó- de palabras  ansiosas de sentido”. 
Muchas de las personas que asistieron a la mesa redonda realizan un trabajo voluntario “comprometido”, una característica primordial para Imanol Zubero, profesor de la Universidad y dedicado a la política activa durante un tiempo. Refiriéndose a la parábola dijo que “el samaritano es una buena ventana para mirar la realidad y aunque, en este momento, la política está caída en el camino – añadió- es una ocasión de oro para cambiar perspectivas”. A su modo de entender, la política no debería de hablar “en términos de imposibilidad y debería introducir cálculos de sufrimiento en sus valoraciones”. Por otra parte, no debería perder la “capacidad de mirar los márgenes del camino”.
Última sesión
Hoy finalizará el cursillo organizado por Pastoral de la Salud con la eucaristía presidida por el vicario general, Félix Alonso, a las 17h. en los Jesuitas de Indautxu.