¿Por qué decidieron embarcarse en esta aventura?
Más bien nos embarcaron. Pertenecemos al movimiento al Movimiento Apostólico de Schoenstatt, y hemos consagrado nuestro trabajo profesional exclusivamente a la evangelización. Nos ayudó mucho nuestro trabajo en Barrio Sésamo durante cinco años. Nos dimos cuenta que si queríamos llegar a la infancia era importante utilizar estos medios y así comenzamos la familia al completo. Trabajamos para un canal de EEUU que tiene una cobertura de 970 millones de familias, con lo cual ya podemos estar más que satisfechos de la cantidad de público al que llegamos y del poder multiplicador del mensaje.
¿Qué supone esta experiencia de compartir la misma misión y trabajo profesional?
Es extraño y estupendo que los hijos también hayan asumido la misma misión. El punto a favor es el patrimonio espiritual que se ha ido trabajando a lo largo de los años. Nos sentimos realizados profesionalmente y además nuestra vida adquiere sentido porque podemos explotar nuestros talentos y evangelizar.
¿Cómo se coordinan para el trabajo, cada cual tiene su papel?
Normalmente hay un guionista y las ideas las vamos haciendo entre todos. Somos muy críticos porque nos complica la vida, pero creemos que es fundamental no escatimar esfuerzo ni recursos y entregar un producto lo más competitivo posible con los medios que no son católicos. Tenemos que estar a la altura y no podemos entregar un producto mediocre porque eso supondría una contra propaganda.
¿Cuáles son las claves para realizar este trabajo?
Profesionalidad y acertar con productos divertidos. Nos llegan cartas y comentarios a la web agradeciendo el trabajo que realizamos. El feed-back es muy positivo.
02.05.2016
El conjuro mágico surte efecto
Fueron muchas las personas de todas las edades y culturas que disfrutaron de una nueva edición del encuentro `Abracadabra´, que se celebró el sábado día 30 de abril, en el atrio de la Universidad de Deusto. La lluvia que se presentó desde primera hora disuadió a algunas personas, pero no deslució el buen ambiente que se vivió en el espacio que compartió gente de toda procedencia y edad. El juego de la rana, los bolos, la goma, juegos de ordenador, elaboración de talos… fueron varias las ofertas lúdicas que se organizaron y también tuvo su función `Valiván´ una familia que se dedica a evangelizar utilizando los medios audio-visuales.