“Han dejado un legado grandísimo en Ecuador”

Entre las reuniones mantenidas a lo largo de esta semana, ha estado con el obispo responsable de Misiones Diocesanas, Mons. Mario Iceta y, ayer compartió la jornada, en Gasteiz, con responsables de Misiones, Cáritas y misioneros. Destacó que las Diócesis vascas están siendo uno de los grandes apoyos “antes, durante y después del terremoto”, -dijo- y agradeció “el legado grandísimo” recibido a lo largo de los años, así como la visita que Mons. Mario Iceta, junto a la delegada de Misiones de Bilbao, Feli Martín y el vicario de Bilbao y misionero, Antón Rey, realizaron el pasado mes de septiembre a Ecuador. “Allí –explicó- constataron la realidad y pudieron tener una visión directa de cómo se está desarrollando la respuesta para afrontar la crisis después del terremoto”.
En el encuentro de ayer, en Gasteiz, explicó, entre otras cosas, las cuatro comisiones creadas por la arquidiócesis de Portoviejo tras el terremoto: Una Comisión de emergencia para los primeros momentos, en los que se repartieron mantas, víveres, medicinas; la Comisión de ayuda psicológica para niños y niñas, adolescentes y personas adultas; la Comisión para reconstrucción de estructuras pastorales y de culto (de 90 parroquias: 52 han sufrido algún tipo de daño, 20 de ellas daños muy graves) y la Comisión de Cáritas que se encarga de temas de ayuda social, microcréditos, entrega de materiales de construcción…
Walter Coronel, incardinado a la Arquidiócesis de Portoviejo ha sido por 3 años Fidei Donum en el Vicariato Apostólico del Napo (Región Amazónica del Ecuador) y ha trabajado en la pastoral con las comunidades quichuas. Actualmente colabora con la Arquidiócesis de Portoviejo en la Comisión de Proyectos (para la reconstrucción tras el terremoto) presidida por Monseñor Lorenzo Voltolini.