22-12-2024 Domingo, IV semana - adviento
Bizkeliza 5 Portada 5 “Hay personas que están muriendo en la Amazonía por culpa del oro y el petróleo”
07.11.2019
El obispo de Aguarico (Ecuador), en Bilbao

“Hay personas que están muriendo en la Amazonía por culpa del oro y el petróleo”

A su vuelta del Sínodo de la Amazonía, el obispo de Aguarico Mons. Adalberto Jiménez y el misionero capuchino navarro Txarli Azcona han ofrecido sus impresiones de lo que han vivido en Roma. “Ha ocurrido algo muy importante. Se han escuchado distintas voces y pensamientos. El Sínodo nos ha marcado una vida sobria y eso nos implica a todos”, han compartido ambos. En el encuentro no han faltado la oración, el recuerdo a los misioneros asesinados Alejandro Labaka e Inés Arango ni las apelaciones a la necesidad imperiosa de consumir con responsabilidad porque “o salvamos la Amazonía entre todos o esto revertirá en todo el planeta”.

Los dos religiosos capuchinos han puesto el acento en algunos aspectos que han vivido en torno al Sínodo, que se comenzó a trabajar en la REPAM (Red Eclesial Panamazónica) hace dos años. “En Roma se ha vivido una construcción común, porque todas las personas han tenido la oportunidad de expresarse. También las mujeres indígenas”, han recalcado.

Durante las primeras sesiones se escucharon voces de cardenales y obispos, hasta que el papa dijo: “hace falta que se desborde el río”, entonces fue “cuando comenzaron a intervenir los indígenas”. Txarli Azcona ha señalado que los pueblos indígenas han sentido que el papa está con ellos. En este punto se ha referido al gesto que tuvo el pontífice el segundo día del Sínodo, cuando se fue caminando junto a los indígenas hasta el aula Pablo VI donde se celebraban las sesiones.

Una Iglesia samaritana

Han hablado de una conversión ecológica y de una Iglesia que marca una vida sobria en armonía con la ecología integral y “profética, testimonial, samaritana y servicial”.

En su intervención se han referido al consumo desmedido actual que está destruyendo zonas como la Amazonía. Pero han lamentado sobre todo la “manera romántica” en la que se habla a veces de la ecología, invisibilizando que por el oro y el petróleo se está “arrasando pueblos y personas”.

Han concluido su intervención recordando que el papa ha querido traer “la periferia al centro” y, a partir de ahora han pedido continuar trabajando en el post-sínodo, marcando “nuevos caminos para la Iglesia”.