El acto académico tuvo lugar el viernes pasado en el palacio Euskalduna. Los graduados y sus familiares recibieron con alegría y agradecimiento el título que les acredita para ejercer como maisus y andereños de Educación Infantil y Primaria. Ahora, tal y como resaltó el director de la Escuela Universitaria de Magisterio-Begoñako Andra Mari, tienen una responsabilidad “enorme” que ya han tenido la oportunidad de experimentar en los periodos de prácticas.
El obispo agradeció «la labor excelente» del anterior director, Lander Intxausti y reconoció al nuevo, Santiago Larrañaga y a su equipo su disponibilidad para señalarles que cuentan con toda su confianza. Animó a los jóvenes a darse a sí mismos, a ser comprometidos y a ejercer la tarea con compromiso porque «la educación no puede ser un café para todos», les dijo.
El acto finalizó con un vídeo preparado por los recién graduados con imágenes de su paso por la Escuela Universitaria de Magisterio.