La jornada de hoy es un buen momento para recordar a los casi 200 religiosos y religiosas de clausura de nuestra Diócesis de Bilbao. Hay 15 monasterios de clausura en los que viven cerca de 200 religiosos contemplativos de 10 órdenes diferentes (9 femeninas y 1 masculina, la de los cistercienses de Zenarruza). Son más de 180 mujeres: Agustinas, Agustinas recoletas, Carmelitas descalzas, Clarisas Capuchinas y Franciscanas; Concepcionistas franciscanas, Dominicas, Mercedarias y Pasionistas, repartidas en los 15 monasterios que existen en Bizkaia, además de 4 monjes en un único monasterio masculino de clausura, el cisterciense de Zenarruza.
La actividad diaria fundamental de estos monjes y monjas es la oración, pero en alguno de los conventos se realizan diferentes tareas para ayudar a la economía doméstica, como son la venta de repostería o la costura, que junto con sus pensiones y los donativos que reciben componen su presupuesto.
“Los objetivos de la Jornada Pro-Orantibus son fundamentalmente dos: agradecer y rezar”, explica en su carta para la jornada de hoy, monseñor Vicente Jiménez, quien añade que: “Hoy la Iglesia entera es convocada a una profunda acción de gracias al Señor por la vocación monástica, al tiempo que se nos pide rezar por estos hermanos y hermanas que tanto rezan por nosotros”.
Oración por las vocaciones
Por otro lado, Monseñor Mario Iceta, presidirá esta tarde en la catedral de Santiago de Bilbao, una Oración por las vocaciones.
Como cada tercer domingo de mes, tras la Eucaristía de las siete de la tarde se celebrará un momento oracional por las vocaciones.
Confirmación en Portugalete
Loreta Morate, de 29 años, recibirá hoy de manos del obispo, monseñor Mario Iceta, los sacramentos de bautismo, confirmación y comunión, en la Basílica de Santa María de Portugalete. Loreta ha pasado por un periodo de tiempo de preparación de los sacramentos, acompañada en la fe de iniciación cristiana por Teresa Diez Barrio, Hermana de la Caridad de Santa Ana.
16.06.2011
Hoy se celebra la Jornada Pro Orantibus
Cada año, en la solemnidad de la Santísima Trinidad, la Iglesia celebra la Jornada Pro Orantibus, (por los que oran), “para dar gracias a Dios –destaca Mons. Vicente Jiménez, Presidente de la Comisión Episcopal para la Vida Consagrada- por el gran don de la Vida contemplativa y la presencia luminosa de los muchos monasterios que pueblan nuestra geografía”.