En el encuentro de esta tarde, en Berriz, se pretende mostrar a las personas asistentes lo que es un grupo de referencia «a través de lo experiencial».
Tras la presentación, los participantes se dividirán en diferentes mesas, cada una de ellas con una acompañante, que dinamizará la actividad y cada mesa tendrá un picoteo y algo de beber.
«Utilizaremos -explican- la metáfora de la brújula, para generar diálogo sobre las diferentes vivencias de la fe. La brújula ayuda a mantenerse en el camino correcto hacia el destino al señalar siempre hacia el norte, de la misma manera que tener claros los objetivos y valores en la vida,ayuda a no perderse a pesar de los desafíos diarios y asegura que se va en la dirección adecuada. Dios nuestro norte».
