La Universidad de Deusto es “parca” en la concesión de estas distinciones, según reconoció Eduardo Ruiz Vieytez, director de Instituto de Derechos Humanos Pedro Arrupe en su “laudacio” sobre Jon Sobrino de quien dijo que “tuvo el honor y el dolor de recoger las herencias de Monseñor Romero y de Ignacio Ellacuría”. Jon Sobrino que acumula ya una veintena de estos reconocimientos honoríficos de distintas universidades, comenzó recordando a los mártires de la UCA, especialmente a Elba y a Celina, “símbolos del pueblo crucificado” y abogó por la “lucha, para revertir un mundo inhumano, a la que esta universidad no debiera ser ajena”.
Con una sonrisa permanente recorrió el sufrimiento mundial actual y recordó la apuesta de Ellacuría por una “civilización de la pobreza”, no de la austeridad, que se queda solo en la contraposición al derroche, para recordar que los “países de abundancia no tienen esperanza”. Finalizó dando las gracias a la Provincia de Loyola de la Compañía de Jesús por los centenares de jesuitas enviados a Japón, al Congo…con el compromiso de hacer un mundo más humano.
Nacido en Barcelona en el año 1938, se trasladó de niño a Bilbao, donde estudió en el colegio de los jesuitas de Indautxu antes de ser enviado como novicio a El Salvador a los 18 años de edad. Más tarde cursó estudios de ingeniería en la universidad de San Luis, en los Estados Unidos y Filosofía, Teología en Frankfurt , Alemania. Volvió a El Salvador como profesor universitario de teología en la Universidad Centroamericana «José Simeón Cañas», la cual ayudó a fundar y fue estrecho colaborador del arzobispo de San Salvador Óscar Romero, asesinado en 1980. El 16 de noviembre de 1989, por encontrarse en Tailandia dictando una conferencia, escapó de una masacre perpetrada por agentes del estado salvadoreño en la cual seis de sus compañeros jesuitas (Ignacio Ellacuría, Segundo Montes, Juan Ramón Moreno, Ignacio Martín Baró, Amando López, y Joaquín López y López ) y la trabajadora Elba Ramos junto a su hija Celina murieron asesinados en la misma residencia universitaria donde hoy sigue impartiendo sus bellas, sentidas y comprometidas lecciones.
11.12.2009
Jon Sobrino investido doctor Honoris Causa por la Universidad de Deusto
La Universidad de Deusto concedió ayer al profesor jesuita, Jon Sobrino el título de Doctor Honoris Causa por sus méritos académicos y por su compromiso en la defensa de los Derechos Humanos y de las minorías empobrecidas. Sobrino se ha distinguido especialmente por su defensa del derecho a la vida de los sectores más pobres de El Salvador, país en el que trabajó junto a Ignacio Ellacuría y a los otros siete asesinados en 1989, por militares salvadoreños, hace ahora 20 años. El acto académico de investidura se celebró ayer, a las doce del mediodía en el Paraninfo de la Universidad de Deusto, justo en el día en el que se conmemoraba el 61 aniversario de la aprobación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Jon Sobrino durante su intervención de ayer en Deusto.
