¿Por qué esta propuesta?
Hay dos razones fundamentales. Una es la percepción de algunas limitaciones o deficiencias en nuestros procesos actuales de educación en la fe. Estamos preocupados por generar experiencias de encuentro con Dios. Hemos avanzado mucho en las dinámicas educativas y pedagógicas pero aún falta el encuentro cara a cara con Dios. Esta una asignatura pendiente ahora y siempre.
¿Tiene actualidad ?
Alguien nos puede tachar de estar chapados a la antigua, pero consideramos que es una necesidad muy actual. Cada vez es más difícil tener experiencia de encuentro con realidades de pobreza y exclusión entre los jóvenes. Sospechamos que las dos cuestiones tienen algo que ver entre sí.
En cuanto a la dimensión social de la fe, es difícil mostrarla si no tenemos experiencias concretas de encuentro y compromiso y posiblemente el medio más adecuado es a través de estas realidades.
¿Qué tiene de novedoso?
Hemos ido recogiendo experiencias que han funcionado en otros ámbitos y las hemos trasladado a este campo. Son preocupaciones compartidas por distintos espacios de los servicios de la curia y de algunas instituciones diocesanas que trabajan en el ámbito de la exclusión. Siendo conscientes de que cada vez hay más dificultades de incorporar a los jóvenes en algunos proyectos nos pusimos a trabajar desde junto con Cáritas y Misiones. De este modo, han surgido tres proyectos concretos para el verano pero con la intención de iniciar un itinerario a lo largo del curso que viene.
¿Las experiencias de verano se utilizarán como pruebas piloto?
Efectivamente. Es una propuesta de cara al curso que viene pero hemos decidido comenzar con algunas actividades concretas para el verano. Uno de los proyectos se desarrollará en la casa de los franciscanos de Alhoucema (Marruecos), con la intención de acercarlos al mundo del sufrimiento y la enfermedad.
Otra experiencia está dirigida a un campo de trabajo en el centro penitenciario de Basauri y la tercera iniciativa se desarrollará en la colonia urbana de San Francisco.
La propuesta se realizará en el mes de julio y está dirigida a jóvenes con sensibilidad creyente que tengan interés en compartir su tiempo libre de una manera diferente.
24.04.2013
“La experiencia de Dios es siempre y ahora una asignatura pendiente”
Diversos departamentos de la Diócesis presentaron ayer una nueva iniciativa dirigida a los jóvenes que quieran “encontrarse con Dios en el mundo de la exclusión”. La propuesta incluye el encuentro personal en los ámbitos de la enfermedad, la solidaridad con el Sur o las cárceles. El programa está dirigido a jóvenes de 18 a 24 años. Galo Bilbao y Belén Rodero dan cuenta, desde Apostolado Seglar, de las razones fundamentales del proyecto.