Miembros del equipo formativo, seminaristas y sus familias, así como representantes de distintos ámbitos de la vida diocesana acudieron a la convocatoria del seminario en el comienzo de curso.
Tal y como informábamos en esta misma web hace unos días, siete seminaristas forman parte del Seminario diocesano, en sus diferentes etapas en este curso, además de otras personas que se encuentran en proceso de discernimiento o de residencia vocacional.
El obispo, en su intervención, resaltó la dimensión misionera y comunitaria del presbiterado y tuvo palabras de agradecimiento para los seminaristas y para sus familias “custodios de la vocación de sus hijos”, también agradeció a quienes ayudan económicamente en el sostenimiento del Seminario.
El director espiritual, Dionisio Larrañaga, invitó a los jóvenes a la escucha y dijo que un acompañante espiritual debe ejercer de “padre, guía, médico, amigo y pastor” y acompañar en los distintos ámbitos.
Por su parte, Miguel Vera, coordinador de dimensión intelectual reivindicó una formación sólida y abierta “que nos capacite a las necesidades del futuro”. Vera destacó que la Iglesia presenta unos muchos retos y unos cambios profundos “que nos tienen que encontrar preparados” e instó a los seminaristas a tomarse en serio la formación “Nos espera un mundo en cambió”, concluyó.
Aitor Uribelarrea, rector del seminario dio lectura a la memoria del curso anterior y repasó algunos de los hitos y retos de este curso así como los nuevos proyectos de la institución.
Patxo Ateca, nuevo seminarista diocesano, así como Fabián, Mario y Ander, las tres personas que inician su etapa en la residencia vocacional dieron su testimonio y explicaron el porqué de su entrada en el Seminario diocesano. Tras este acto el Obispo presidió la Eucaristía en la capilla del Seminario.
30.09.2017
“Las familias son los custodios de la vocación de sus hijos”
Estas palabras fueron pronunciadas por el obispo diocesano, Mons. Mario Iceta, en el acto de inauguración oficial del curso del Seminario Diocesano que tuvo lugar este sábado, 30 de septiembre, en Bilbao y en el que se dieron cita más de ochenta personas.