Las Entidades que integran la Confederación, presidida por Carlos Bargos de la Fundación Gizakia, han compartido los datos relativos a las entidades que atienden en las comunidades de Cataluña, Extremadura, Aragón y Euskadi. De las 8.632 personas con adicción atendidas, 264 se encuentran en prisión. El año pasado acompañaron además a 700 adolescentes con comportamientos de riesgo. Señalan que, respecto a años anteriores, han aumentado los jóvenes menores de 16 años atendidos en los centros de la Confederación.
En este ámbito de la adolescencia, Gizakia constata que la edad de los adolescentes que acuden con sus familiares a recibir tratamiento es cada vez menor. Ignacio Palacio, gerente de la fundación, ha resaltado que hace unos años se atendía a jóvenes a partir de los 16 años y, últimamente la intervención se realiza en edades más tempranas. “Con el paso del tiempo las problemáticas de la juventud se han ido manifestando cada vez más pronto. Ahora atendemos desde los 13 años hasta los 21 y a padres con hijos, hasta los 12 años. La edad media más o menos es de 16 años”. Ignacio destaca que, en el caso de estos jóvenes “no se puede hablar tanto de adicción, sino de consumos de riesgo y de comportamientos de riesgo”. En el programa denominado `Hirusta´, atienden a un 44% de jóvenes por problemas con consumos, pero el resto no tiene que ver con ello. “Violencia en la familia, trastornos mentales, problemas de bulling en los centros educativos y cada vez nos llegan más familias preocupadas por el uso que hacen sus hijos de las nuevas tecnologías”, subraya.
Perfiles de los usuarios en el Estado
Las personas atendidas por la red de entidades que conforman la Confederación son en su mayoría (81,80%) hombres y un 60,90% tienen entre los 30 y 48 años. Sigue la tendencia al alza del tratamiento por la adicción al alcohol, que supera a la cocaína en el conjunto del estado. En Euskadi, sin embargo, los tratamientos por adicción a la cocaína superan a los del alcohol.