En dicha nota hacen una petición a los profesores de religión, otra a la comunidad y una tercera a las familias y a los alumnos y alumnas. A los profesores de religión y educadores “al tiempo que agradecemos su trabajo, pedimos que continúen prestando su testimonio y una enseñanza de calidad, para responder a las necesidades de nuestro tiempo”.
A la comunidad cristiana y a sus responsables “pedimos que impulsen la educación religiosa tanto en la escuela pública como en la concertada, como medio de colaborar a la construcción de una sociedad solidaria y justa”. Y finalmente a las familias y a los alumnos y alumnas “animamos a que, en cumplimiento de su responsabilidad y en uso de su derecho, pidan expresamente la enseñanza religiosa en los centros docentes que deben ofertarla”.
Todo ello basado, según explican al comienzo de la nota, en que “la enseñanza de la religión en la escuela, como fe y cultura cristianas, con sus implicaciones éticas, es un derecho, un deber y un servicio que colabora a la formación de personas libres y responsables, propone una visión profundamente humana del mundo y de la vida y aporta claves para comprender la cultura de nuestro pueblo”.
El período de prematriculaciones para el próximo curso comenzará el próximo lunes 6 de febrero y se cerrará el día 17 del mismo mes.