“Los vascos tenemos que estar orgullosos con la RGI”

En Bizkaia, el 1 de enero del año pasado, había censadas 68.159 personas. Los datos, normalmente llevan un retraso de un año. De todas maneras, sumando los que se han ido nacionalizando, serían unos 85-90 mil. En porcentajes, el 5,9% tiene nacionalidad extranjera.
A consecuencia de la crisis, los flujos han cesado o se han reducido y la población extranjera va disminuyendo poco a poco.
Los últimos años, y sobre todo por influencia de la crisis económica, ¿ha cambiado nuestro parecer y comportamiento con las personas inmigrantes?
Muchos han utilizado la crisis como excusa. Estaban dispuestos a hablar mal de la inmigración, y ésta ha sido la ocasión perfecta. De todos modos, la opinión ha cambiado, pero el comportamiento no tanto, afortunadamente hay una gran distancia entre lo que pensamos y lo que hacemos.
En la última Carta Pastoral los obispos han manifestado que son necesarias las ayudas como la RGI. ¿Qué opinión le merecen éstas u otras prestaciones, ¿son necesarias?
Estas prestaciones son muy necesarias. Gracias a la RGI, nuestra sociedad es muy decente. Si no hubiera RGI, la pobreza sería tremenda. Otro gallo nos cantaría si en lugar de hablar mal del ciudadano o vecino que se aprovecha de la ayuda, respaldáramos la RGI. La RGI es la decisión más decente y humana que se ha tomado en la sociedad vasca durante los últimos 35 años, que nadie lo dude. Los vascos tenemos que estar orgullosos de la RGI. Y por encima de todo los cristianos, ya que ahí se realiza el mensaje de San Mateo sobre el “Juicio a las Naciones”: “Cada vez que se lo hacéis a uno de mis hermanos más pequeños, me lo habéis hecho a mí…”:
¿Cuál es su opinión sobre algunas iniciativas que se están realizando para erradicar los prejuicios y rumores?
Las personas simplificamos la realidad con prejuicios y rumores, pero si son para marginar y despreciar a otras personas, entonces resultan peligrosos. La inmigración es un fenómeno complejo e incomprensible y, por tanto, no se puede simplificar. Los esfuerzos en ese sentido son importantes. La función de todas las iniciativas es muy simple: “antes de hablar mal, piensa dos veces lo que vayas a decir, busca una información veraz; si no, perjudicarás a un pobre”.
En nuestra sociedad, hubo una época en la que recurríamos a los emigrantes para el cuidado de los mayores y las labores domésticas. Pero muchos no están integrados. ¿Por qué?
Sí, tenemos un grave problema, ya que necesitamos de la inmigración y no lo reconocemos. Si mañana los inmigrantes realizaran una huelga de un día, comprobaríamos como en las huelgas de las escuelas qué problemas surgen. Hoy en día, sin emigrantes no podemos solucionar nuestros problemas demográficos, todo lo relacionado con el cuidado y vigilancia.
Si en lugar de pensar en una huelga, mañana decidieran todos marcharse de aquí, surgirían graves problemas en las familias.¿Dónde hay instalaciones para la acogida y cuidado de nuestros mayores? Gracias a que han llegado los inmigrantes. Hace 60 años la empresa era el empresario para los que llegaron de España; hoy, la empresa es la familia.
Brevemente, ¿qué mensaje quiere resaltar en la conferencia?
Que aunque los inmigrantes no sean del agrado de algunas personas, les necesitamos y tenemos que valorar su aportación.