En esta ocasión las sesiones comenzaron ayer lunes por la tarde, con el discurso del presidente de la Conferencia Episcopal y arzobispo de Barcelona, cardenal Juan José Omella, en su primera intervención tras ser elegido presidente en la plenaria del pasado mes de marzo y seguidamente intervino el nuncio apostólico, Mons. Bernardito C. Auza.
Entre los temas de esta edición, los obispos recibirán Información de las comisiones episcopales, tratarán también diversos asuntos de seguimiento y procederán a la aprobación de distintas Asociaciones Nacionales. Otro de los asuntos será el del nombramiento de vicesecretario para Asuntos Económicos y como es habitual en la Plenaria de noviembre, se estudiarán y aprobarán los presupuestos de 2021, los balances y liquidación presupuestaria del año 2019, y los criterios de constitución y distribución del Fondo Común Interdiocesano.
El orden del día incluye de las sesiones incluye, entre otros, el estudio de las líneas de acción pastoral de la Conferencia Episcopal para el quinquenio 2021-2025, así como el diálogo sobre la situación de la pastoral en este tiempo de pandemia y reflexión sobre las consecuencias económicas y sociales por la COVID-19 y se tratará la aprobación de la “Instrucción pastoral sobre el acompañamiento en la muerte y el duelo. Anuncio de la Vida eterna. La celebración de exequias e inhumaciones” y la misión evangelizadora de la Iglesia en España a la luz del Directorio de Catequesis y de la Instrucción “La conversión pastoral de la comunidad parroquial al servicio de la misión evangelizadora de la Iglesia” de la Congregación para el Clero. Con el diálogo sobre la puesta en marcha del nuevo “Plan de formación de los Seminarios” se dará por concluido el programa.