El obispo de Bilbao presidió la Vigilia de Oración que se celebró el sábado por los refugiados y migrantes de cara al Consejo de Ministros que celebra hoy la Unión Europea. El prelado realizó una reflexión en su homilía en la que manifestaba que no es momento de “demagogias, improvisaciones, oportunismos o emotivismos que no mueven a obrar”. Decía que la comunidad cristiana está acostumbrada a “acoger con generosidad” en otras ocasiones y que estaba convencido de que ahora se iba responder de la misma manera.
Por otra parte, encomió a mirar las causas por las cuales “miles de hermanos” están obligados a salir de sus lugares de procedencia e incluso a dejarse la vida en el camino. Pidió a que se solucionaran “con audacia y valentía” las dificultades que tienen para que no tengan que partir de su tierra.
El obispo de Bilbao habló también de los muros y vallas que “fragmentan la humanidad” y que son reflejo de los muros “que tenemos en el corazón”. “Hoy venimos a orar para que el Espíritu Santo nos dé el don que cambie nuestro corazón y derrumbe nuestros muros interiores”, dijo.
Labor actual de Cáritas Bizkaia respecto a las personas refugiadas
Recogiendo la petición de la Diócesis de Bilbao para dinamizar el proceso de acogida de personas refugiadas, Cáritas Bizkaia ha puesto en marcha un `Comité de Apoyo´ que ha iniciado la fase de recogida de colaboraciones.
Hay diversas maneras de colaborar “poniendo a disposición de Cáritas viviendas equipadas, por medio de donativos económicos o participando en el voluntariado”. Hasta el momento ha habido personas que han solicitado información y que se han ofrecido para acompañar en el proceso a las personas que lleguen
14.09.2015
Obispo: “Estoy convencido de que nuestra comunidad acogerá con generosidad»
Mientras en la Unión Europa prosiguen con sus discrepancias sobre una posición común respecto a la ubicación y al número de refugiados que acogerá cada país, nuestro entorno se está moviendo para concienciar a la ciudanía y coordinar la llegada. Sirva como ejemplo la Vigilia de Oración que se celebró el sábado pasado en la parroquia de los Jesuitas, en la que se escucharon algunos testimonios de personas refugiadas que viven en Bizkaia y el obispo compartió una reflexión ante unas 300 personas que participaron en la celebración.