Pastoral de la Salud inicia el curso con una nueva responsable, Laura Etxeberria, que revindica la importancia de interrelacionar el ámbito de los hospitales y las parroquias, así como impulsar la labor de sensibilización “para animar a las personas a que participen en este mundo, porque a algunas, el mundo del dolor y del sufrimiento les genera miedo o pudor. Sin embargo, -dice Laura- la experiencia nos confirma que el voluntariado que colabora en esta área experimental algo muy gratificante”.
Entre los retos de Pastoral de la Salud para este año está el fortalecer la estructura territorial, a través de intensificar el acompañamiento y realizar encuentros de voluntariado en las vicarias. También, la sensibilización: “queremos que nuestras comunidades se hagan eco de la labor necesaria de acompañamiento a las personas enfermas y que podamos convocar compartir compromiso con nuevas personas en nuestros grupos”. Además, la coordinación con los hospitales “Es muy importante el espacio de trabajo común y para ello debemos mejorar en la comunicación y relación entre los grupos y los equipos de los servicios acompañamiento religiosos y espiritual» y la relación con otras pastorales y entidades, por ejemplo, «queremos dar un paso significativo este curso de conocimiento mutuo con las personas de Cáritas, principalmente, con el voluntariado del área de mayores”.