¿Cómo os estáis adaptando a la actual situación?
El área de mayores se está adaptando teniendo en cuenta cómo cambian las cosas, escuchándolas e intentando ver cómo podemos seguir ofreciendo apoyo de la mejor manera. Estamos intentando adaptar nuestro hacer, porque queremos seguir al lado de las personas mayores.
¿Qué debemos recordar este 1 de octubre?
Es el inicio de curso también y nos ayuda a recordar dónde tenemos que poner la fuerza. Este año Cáritas Española se ha adherido al manifiesto que han publicado con motivo del Día desde la Mesa Estatal por los Derechos de las Personas mayores. Cáritas Bizkaia también se suma a este manifiesto, como parte de la confederación. En el mismo se reflexiona sobre el papel de las personas mayores, cómo deberíamos actuar…
Recordar que, aunque hablemos de personas mayores normalmente estamos pensando en un colectivo homogéneo. Pero un tema que tenemos claro es que el colectivo más heterogéneo es de las personas mayores. No todas viven el deterioro de igual manera. Con el COVID hemos vivido algunos momentos en los que se marcaban horarios para las salidas de las personas mayores. Muchas no se han sentido libres para decidir. Ahora debemos recuperar la autonomía y la libertad que han perdido en este tiempo.
¿Cuál es el reto?
Una cosa que nos ha marcado esta crisis es lógicamente la preocupación de la salud física. Hemos visto que el virus tiene consecuencias más negativas entre las personas con más vulnerabilidad. Pero esta situación no solo se da entre las personas mayores. Queriendo cuidar la salud física, nos hemos olvidado en algunos momentos de la salud emocional.
Hemos dado un paso atrás en el reconocimiento de que las personas adultas son autónomas y debemos dejarles elegir.
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