Roberto Vidal, nuevo director de los hogares sacerdotales

¿Qué supone esta nueva encomienda?
Primeramente, un reto, porque es algo novedoso para mí. Pero, al mismo tiempo, es una manera de poner mi trabajo al servicio de quienes han estado en las comunidades liderándolas, cuidándolas, sirviéndolas. En este momento, a nosotros también nos toca hacernos cargo de esa realidad.
Por tu recorrido, no te resulta una labor desconocida ¿verdad?
De alguna manera, espero encontrarme con caras conocidas. De curas que, de algún modo, se han ido cruzando en mi proceso y en mi vida. Es verdad que el ámbito socio sanitario no me es desconocido porque soy educador social y el mundo de la vulnerabilidad, de la fragilidad ha sido, de alguna manera, mi espacio profesional.
¿Estarás también vinculado a la Delegación de Anuncio y Catequesis?
Seguiré combinando la dirección de los Hogares y la Pastoral Universitaria y de Profesionales – en la Delegación-, que de alguna manera supone también buscar sinergias entre ambos espacios.