Carolina, nació en la Diócesis de Machakos (Kenia) hace 28 años en el seno de una familia creyente. Con vocación de vivir la vida contemplativa, contactó con una monja salesa que reside en Vitoria y ella le habló del monasterio de Lekeitio. Llegó a Bizkaia hace siete años y medio y, desde entonces, “es una más”, detalla la priora, sor María Elena. Son 15 las religiosas que forman la comunidad que reside en el monasterio que tiene seis siglos y medio de vida.
En la celebración de la Profesión Solemne que tendrá lugar mañana, no faltarán los irrintzis, la música y los bailes originarios de Kenia, país del que provienen muchas de las religiosas que forman la comunidad. “Con ellas también bailarán algunas lekeitiarras”, subraya la priora.
El rito de Profesión Solemne
Mañana, sor Carolina dará el último paso para convertirse en monja dominica, `hasta la muerte´, tal y como pronunciará en la fórmula de Profesión. En la Orden de los Predicadores, a la que pertenecen las dominicas, se hace Profesión solamente de Obediencia, pero en ella se incluyen los votos de Castidad y Pobreza.
