La mesa redonda de testimonios tuvo lugar con motivo del 60 aniversario de la llegada de los primeros misioneros vascos a Mufunga, en el antiguo Zaire, actualmente República Democrática del Congo.
Compromiso y solidaridad son dos palabras que definían muy bien a todas y cada una de las personas que participaron ayer y que narraron algunas de sus experiencias en Misiones. El grupo era variado en cuanto a los períodos de presencia en R.D. del Congo o las tareas realizadas, pero ante la pregunta de por qué ser misioneros, coincidieron en señalar que en las Diócesis se respiraba entonces un espíritu misionero. Un ambiente que se vivía desde el propio Seminario, donde se constituyó una academia de Misiones y que frecuentemente escuchaban el testimonio de misioneros, que marcaron su opción por la Misión. Cuando les llegó el momento de la solicitud para ir a la Misión, la respuesta positiva emergió de manera natural y espontánea.
En la sesión, los ponentes también tuvieron muy presente el agradecimiento a sus familias y compañeros que les apoyaron cuando decidieron marchar, así como a todas las personas que les han ayudado durante toda su vida misionera.
El obispo de Bilbao, Joseba Segura que es, a su vez, obispo responsable de Misiones Diocesanas Vascas y presidente de la Comisión Episcopal para las Misiones y Cooperación con las Iglesias de la Conferencia Episcopal Española, cerró el acto. Segura fue misionero en durante 12 años y, en 2023, siendo ya obispo de Bilbao, viajó a R.D. Congo, para conocer la labor que a lo largo de estas seis décadas han llevado a cabo los misioneros y misioneras vascos y para visitar a Xabier Goicouría.
