Loli García Ríos, de la Delegación de Misiones, explica en qué consisten estas experiencias de verano: Son unas semanas en las que se convive con una familia, un equipo, una comunidad que acogen para poder conocer una realidad de Iglesia liberadora comprometida con las personas empobrecidas. ¿Con quién? Con los equipos de Misiones Diocesanas Vascas en El Oro y Los Ríos y con el Equipo Misionero Itinerante en Chimborazo. ¿En qué consisten? En participar en las misiones o en un campo de trabajo, dentro del marco de la actividad pastoral. ¿Quiénes? Las personas que previamente han realizado el curso Norte-Sur y quienes viven los hermanamientos. ¿Quién acompaña? Los equipos que reciben y una persona que ha acompañado el proceso de formación.
Elementos importantes de un hermanamiento
Desde la delegación de Misiones destacan la importancia de la motivación de fe y el compromiso cristiano; La reflexión compartida de la palabra de Dios en cada grupo y como elemento común de todos; La apertura a la palabra de Dios que se nos transmite a través de los pobres; La reunión y el trabajo en equipo, la coordinación; Un grupo que asume el hermanamiento y lo que implica. Además, continúan, “La presencia nuestra allí y la presencia de ellos aquí, una presencia “misionera” que nos ayuda a poner rostros a los “hermanos y hermanas”.
09.07.2010
“Una oportunidad para aprender y para aportar desde la sencillez”
Desde estas claves ha viajado a Ecuador el primer grupo de personas que se han formado en el curso Norte Sur, organizado por el Instituto Diocesano de Teología y Pastoral (IDTP), Misiones y Cáritas. Los participantes tendrán la oportunidad de aprender y compartir junto nuestras gentes de Misiones Diocesanas en Arenillas, Santa Rosa y Huaquillas en la provincia de El Oro y en Baba provincia de Los Ríos. Otro grupo viajará a principios de agosto, esta vez a Riobamba, provincia de Chimborazo también en Ecuador.