El congreso celebrado en Valencia, ha realizado un recorrido por las diferentes tipologías de patrimonio de la Iglesia. Además de la importancia del patrimonio documental conservado y difundido en los archivos de la Iglesia, se ha mostrado la relevancia de documentar ese patrimonio, explica Anabella Barroso. En este sentido, la ponencia de María Fernández Hierro insistió en la necesidad de conservar documentos que muestren la evolución de los inmuebles y acrediten su propiedad. Fernández Hierro, incidió especialmente en que hay que guardar los documentos generados para esas funcione, «de forma didáctica desgranó los diferentes documentos que son importantes para los bienes muebles e inmuebles».
Por su parte, la directora de Labayru Fundazioa, Igone Etxebarria, hizo un recorrido por la labor de esta institución diocesana para recoger, conservar y difundir el patrimonio inmaterial desde los años 70 del siglo XX hasta ahora, «actualmente, con proyectos sobre inculturalidad y sobre ritos, objetos y fiestas vinculadas a las ermitas». Los materiales y grabaciones recogidos han generado un importante archivo y centro de documentación así como una gran biblioteca de tema vasco.
Anabella Barroso, en su intervención, planteó la necesidad de unificar criterios para la gestión y conservación y, especialmente, difundir de forma integrada todos los elementos vinculados al patrimonio cultural de la diócesis en sus diversos ámbitos: Inmuebles, bienes artísticos, documentos, libros, fotografías, videos, podcast, etc., «un importante reto -señala- en el que todos y todas tenemos responsabilidad de generar memoria, conservarla y difundirla».
