Este año y debido a las circunstancias extraordinarias que estamos viviendo, el campo de trabajo de San Francisco que organizan Cáritas y las Hermanas Pasionistas se realizará de otra manera. Marije Calvo, una de las organizadoras del proyecto, explica que se quiere ofrecer una experiencia de “voluntariado y fe compartida” a un grupo de 12 personas voluntarias y coordinadoras.
Con el objetivo de conocerse “uno mismo y la realidad que nos rodea” el programa consiste en acompañar a los niños y niñas por las mañanas y por las tardes, “abrir los ojos para conocer las diferentes situaciones del entorno de San Francisco”.
“Este barrio, con todos los colectivos y situaciones que reúne, nos da la posibilidad de poner en práctica el evangelio “, señala la religiosa pasionista Marije Calvo, quien a partir del próximo curso será la nueva responsable de la Pastoral de Migraciones en la Diócesis de Bilbao.