La propuesta del grupo organizador es ofrecer una experiencia de voluntariado y fe compartida, a un grupo de 13 personas voluntarias y coordinadoras procedentes de diferentes lugares: Bilbao, Sevilla, Barcelona y Madrid.
Por otra parte, se posibilita a 67 menores del proyecto de Cáritas Infancia –Tximeleta-, un espacio de ocio y tiempo libre. «Para que puedan disfrutar y divertirse todas las mañanas».
“El objetivo del campo de trabajo de “Sanfran” –explica la religiosa pasionista Marije Calvo– es conocerse a uno mismo y al mismo tiempo conocer la realidad que nos rodea, cambiando la mirada». Por la mañana, estarán con los menores. «Por las tardes, abrimos los ojos a las diferentes realidades que están a nuestro alrededor y que, en ocasiones, no somos capaces de ver o simplemente, nos son desconocidas”.
Abrir los ojos
Ayer domingo, después de un primer día intenso de formación, concluyeron la jornada con la Eucaristía. Estuvo presidida por Alex Alonso, vicario territorial de la vicaría IV. “Nos ha invitado a abrir los ojos a esta experiencia de servicio y de entrega a los más pequeños. Para que puedan tener un verano divertido. Al mismo tiempo, a que todo lo que vayamos viendo lo pasemos por el corazón y lo pongamos en manos de Jesús”.