José Mª Irazola (Legelario Baserria. Elorrio 1938), fue ordenado presbítero en el colegio jesuitas de Bilbao en 1964. Su primer destino fue como ecónomo de Labarrieta y posteriormente de Bernagoitia y Otxandiano. De 1973 a 1976 realizó estudios en Roma y a su regreso fue ecónomo de Laukiniz y pasó a formar parte del equipo presbiteral de Sondika. De 1979 a 1997 fue párroco de Bedia y tras un año sabático fue nombrado párroco de las parroquias de Gámiz y Fika. Desde 1999 a 2009 estivo en Laukiz. Posteriormente, hasta su jubilación fue auxiliar de las parroquias de Santa María de Igorre, San Pedro Apóstol de Arantzazu, San Pedro Apóstol de Dima, Santiago Apóstol de Ipiñaburu, La Asunción de Nuestra Señora de Zeanuri, Santa María de Lemoa, San Bartolomé Apóstol de Areatza, Sagrado Corazón de Jesús de Artea-Castillo Elejabeitia y San Juan Bautista de Bedia.
Euskera
El presbítero Ángel Goioaga Rekalde, condiscípulo y compañero de Irazola en la residencia de Venerables donde ambos han vivido varios años destaca su faceta de euskalzale “su gran trabajo por el euskera”. Goioaga resalta que Irazola tenía una grandísima riqueza lingüistica y que hablaba “un euskera sencillo que era entendido por todo el mundo. Lo decía todo con mucha sencillez. Sus homilías eran muy buenas y siempre estaban muy bien preparadas. La gente del pueblo las valoraba mucho”.
Goioaga explica que el trabajo pastoral y el euskera fueron la vida de Irazola y que realizó un trabajo enorme en favor del euskera sobre el verbo batua y el bizkaino “Aditz konparatua” que se ha utilizado mucho en la escuela de idiomas.
Desde 2011, tras una grave caída que le dejó algunas secuelas y necesitó cuidados especializados y hasta su traslado a la residencia Miranda, Irazola vivió en la residencia de Venerables en Bilbao. Su tiempo de ocio lo pasaba caminando “era un gran caminante y eso le venía bien para comunicarse con la gente” otra de sus pasiones fueron los partidos de pelota, que veía siempre que podía.
QEPD. Goian bego