HOAC inicia un tiempo para reflexionar comunitariamente sobre la iniciación de nuevos miembros, en el marco de las acciones de extensión de la asociación. «Consideramos -señalan- que para la misión son imprescindibles personas que quieran dedicar su vida al apostolado en el mundo obrero y del trabajo».
Otra de las apuestas es profundizar en la vivencia del Quehacer Apostólico Comunitario. «En definitiva, la acción en común-unión» como elemento fundamental para desarrollar la fraternidad, la amistad social y el cuidado de la casa común.
Promover el bien común
La Hoac de Bizkaia asegura que «promover el bien común y el trabajo humano exige un esfuerzo coordinado en la construcción de propuestas de sentido y alternativas cotidianas. Ese es el reto al que trata de responder, desde siempre, la HOAC, a través de su Quehacer Apostólico Comunitario, que es central en la vida del movimiento y de sus militantes».
La HOAC sigue preguntándose cuál es la mejor respuesta a los desafíos actuales de las personas y familias trabajadoras y cómo puede acercar el Reino de Dios en medio de las vicisitudes del mundo obrero más empobrecido.
Formación
En el apartado de formación, el movimiento cristiano de Bizkaia se plantea revitalizar la experiencia de la formación «desde la vivencia de la espiritualidad y la mística hoacista».
Además, entre sus apuestas sigue estando el vivir la eclesialidad «de nuestro ser Acción Católica para la Pastoral Obrera. La quinta prioridad atiende a nuestra vida comunitaria y establece una serie de acciones para «seguir creciendo en el cuidado mutuo».