Azarola fue un hombre muy querido y valorado en el barrio de Zabala. “Hizo favores a los muchos necesitados de nuestro barrio –explica Josu López Villalba, compañero suyo presbítero, que esta tarde estará presente en el homenaje-. Por encima de normas y papeleos estaban las personas a las que siempre intento escuchar, comprender y ayudar. Siempre estuvo con los más pobres del barrio, con los gitanos, con los más marginados y débiles, dispuesto a hacer un favor y ayudar en lo que sea. Se conocía los bares y la mayoría de las casas, y conversaba con todos en la calle, tomando potes y dando alegría y buen humor”.
Además de su etapa en el barrio de Zabala, Azarola había sido profesor en el Seminario y en el último periodo de su vida fue capellán del hospital de San Eloy de Barakaldo.
Una institución en el barrio
Ricardo Etxebarria, miembro del antiguo scout de Zabala explica que Emilio Azarola fue una institución en el barrio de Zabala por su labor en todos los campos de la ayuda al necesitado. “Mis compañeros del scout y yo mismo nos formamos como personas gracias, en gran medida, a los medios que puso a nuestra disposición: locales, cobertura legal y apoyo para nuestros proyectos, que fueron una verdadera escuela de la vida. El acto del homenaje consistirá en una misa; descubrimiento de una placa en su recuerdo, canciones y una muestra de respeto y afecto de todos nosotros y de los muchos asistentes que esperamos y que le conocieron”, concluye Etxebarria.