En esta ocasión también el rescate ha llegado demasiado tarde. Pedimos que se erradique la Trata de personas y se proteja a las víctimas, especialmente a mujeres y menores.
Apelamos a la conciencia de quienes hacen las leyes y deciden políticamente en el Consejo de la Unión Europea y, a otros niveles, para que ofrezcan una respuesta real en materia de asilo que proteja y respete los derechos y la dignidad de las personas. Como Iglesia nos sentimos también responsables de esta realidad, porque detrás de cada muerte hay vidas.
Seguimos asistiendo con dolor al drama, que se repite cada día, de tantas personas que buscan un futuro mejor y que por migrar son perseguidas, engañadas, deportadas y asesinadas en el mar.
En el próximo Círculo de Silencio, del miércoles 28 de junio, denunciaremos esta tragedia y nos volveremos a concentrar en Bilbao, Balmaseda, Getxo, Durango, Barakaldo, Portugalete y Galdakao para poner voz a las personas más débiles y clamar por un mundo más justo.
“No dejemos que nuestro mar se transforme en un desolado mar de muerte. No permitamos que este lugar de encuentro se convierta en un escenario de conflicto. No permitamos que este mar de recuerdos se transforme en un mar de olvido. Hermanos y hermanas, por favor, detengamos todo este naufragio de la civilización», Papa Francisco (diciembre 2021, Grecia)
Caritas Bizkaia, Fundación Ellacuría, Bidesari, Itaka-Escolapios, Oblatas, Pastoral de Migraciones, Delegaciones diocesanas: Caridad y Justicia, Ecumenismo y Anuncio y Catequesis, Comunidades Latinoamericana, Africana y China