Una de las obras principales de Paret que puede contemplarse en el Museo es el `Martirio de Santa Lucía´, que Paret pintó para la iglesia de Larrabetzu. Se trata del cuadro más grande jamás pintado por este autor, y «de una calidad extraordinaria«. A su lado, hay obras que pintó, dibujó o grabó para las iglesias de Santiago y San Antón, o para oratorios privados bilbaínos.
Visitas guiadas y un curso de verano
Junto con la exposición, a lo largo de este verano se ha establecido un recorrido por el Casco Viejo bilbaíno para analizar, a través de las realizaciones más destacadas de Paret, la transformación que experimentó la ciudad durante esos años. Además dos reproducciones de sus vistas de Olabeaga y el Arenal han permitido situarlas en el espacio más próximo al lugar en el que presumiblemente fueron pintadas. Del mismo modo, se ha organizado unas travesías fluviales, que ya han finalizado.
La exposición se ha completado con un curso de verano que se celebró en julio en el Auditorio del Museo de Bellas Artes de Bilbao gracias al patrocinio de la Fundación Gondra Barandiarán.