«Día intenso en Kansenia», con esa frase resumía Iñigo Iriarte las primeras horas del viaje del obispo de Bilbao a RD. Congo. «Recibimientos masivos al obispo, en la calle y en la iglesia», destaca.
Ambos se encuentran alojados en la casa de las religiosas Terciarias Capuchinas. Ayer visitaron la tumba del misionero vizcaino Alfonso Saiz, enterrado allí, el «foyer» (hogar) de las chicas y la casa de los curas congoleños. También estuvieron en el Centro Catequético que puso en marcha otro misionero vizcaino, Pruden Escobar.
Imágenes de la tumba del misionero Alfonso Saiz que «Les amis de Tata Alfonso» están arreglando. «Es una buena noticia que ellos mismos la hayan renovado -destaca Iñigo– y no lo han hecho por nuestra visita, porque hasta última hora no sabían que íbamos a Kansenia. Significa que a pesar de los años, Alfonso sigue presente en sus vidas».