El acto, organizado por Euskalerriko Eskautak Bizkaia, consiste en extender por todos los países la luz que un niño enciende en la cueva del Nacimiento de Jesús en Belén. Su distribución se realiza desde Viena donde, unos días antes de Navidad, se reparte la Luz a todos los asistentes para que la hagan llegar a todos los rincones del mundo.
Esta iniciativa se celebra desde 1990 y es un motivo para educar a los niños y jóvenes y para construir la paz en el mundo. Otro objetivo es extender el trabajo activo a favor de la diversidad cultural, étnica, política y religiosa. Además, con la “Luz de la Paz de Belén”, se quiere acercar el sentido de la Navidad a los grupos, a las familias, a los pueblos y a los barrios.