Ayuso considera que “cada uno tiene una llamada de Dios para desplegar una misión personal, original y única en este mundo”. Piensa que descubrir la vocación de cada uno “no es una tarea fácil”. Por esa razón ofrece algunas pistas, como que es importante escuchar e “intuir aquello que nos hace felices y enfocarnos en lo que mejor sabemos hacer”. Y el mismo responde a esta cuestión “es importante dejar este mundo un poco mejor de cómo lo encontramos”.
Explica que lo que más le entusiasmó fueron sus primeras experiencias con personas en riesgo de exclusión social y la vivencia con ellas le encaminó a iniciar su “aventura” que no tiene fin y “que se debe compartir”. Y de este modo se implicó en Cáritas o en la pastoral penitenciaria de Bidesari.
Si alguien quisiera apuntarse a alguna o a las 9 sesiones que tendrán lugar en torno a la vocación en la Diócesis de Bilbao lo puede hacer escribiendo a pastoralvocacional@bizkeliza.org y se le enviará el enlace para participar en las diferentes sesiones ya que, de momento, los encuentros se realizarán por vía telemática debido a las restricciones sanitarias actuales.